La reunión de ministros de Relaciones Exteriores del continente generó poca expectativa internacional, sin ningún asunto urgente o de gran impacto en la agenda.
Cochabamba, Bolivia. Bajo una sombrilla improvisada, Cristina Guzmán observaba pacientemente el domingo el intenso movimiento de automóviles que rompió la tranquilidad del pequeño pueblo suburbano que acoge a la reunión anual de cancilleres de la OEA en el corazón de Bolivia.
Estaba esperando a interesados en los emparedados que puso a la venta en un pequeño puesto callejero frente al hotel de Tiquipaya, en las afueras de Cochabamba, donde se realiza la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos.
Y no estaba sola. Otra media docena de vecinos también vio en la reunión internacional una oportunidad de negocio culinario.
Pero poco antes de la inauguración oficial de la reunión, la clientela era sólo de policías y periodistas.
"En realidad hay poca venta", comentó Cristina, con cierta frustración.
No era lo único que parecía estar por debajo de las expectativas. La reunión de ministros de Relaciones Exteriores del continente generó poca expectativa internacional, sin ningún asunto urgente o de gran impacto en la agenda.
La principal ausencia era la de la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton. El canciller brasileño, Antonio Patriota, tampoco llegaba al encuentro que se prolongará hasta el martes.
Unos 2.000 policías patrullaban Tiquipaya durante la Asamblea, controlando el tránsito de vehículos y vigilando el cumplimiento de una ley seca.
El tema central del encuentro es la seguridad alimentaria, pero se esperan también discusiones sobre la antigua reivindicación boliviana de una salida al mar y una declaración de apoyo a Argentina en su disputa con Gran Bretaña sobre las islas Malvinas, aunque sin grandes sorpresas, dijeron diplomáticos a Reuters.
El presidente boliviano, Evo Morales, inauguró la reunión el domingo.
Pese a que es un encuentro de cancilleres, Morales invitó a su colega ecuatoriano, Rafael Correa, quien se presentará ante la asamblea el lunes.