Un familiar del próximo gobernador del estado de Chihuahua fue asesinado este martes por un comando armado, casi dos semanas después de que muriera ejecutado un sobrino suyo, en medio de una ola de violencia del narcotráfico.
Ciudad de Juarez. Un familiar del próximo gobernadordel estado mexicano de Chihuahua fue asesinado este martes por un comandoarmado, casi dos semanas después de que muriera ejecutado un sobrinosuyo en medio de una ola de violencia del narcotráfico, dijeronautoridades.
El abogado Alberto Porras Duarte, aquien medios locales identificaron como primo del mandatario electo,César Duarte, murió el martes por disparos de bala de un grupo dehombres que lo esperaba afuera de su oficina.
"Iballegando a su despacho y le dispararon", dijo a Reuters CarlosGonzález, portavoz de la fiscalía de Chihuahua, quien agregó que Porrasno era primo de Duarte, sino un familiar en segundo grado.
Unsobrino del gobernador electo fue asesinado el 15 de julio de este año alresistirse a ser secuestrado mientras se hallaba en un negocio familiar.
Elcrimen de Porras ocurrió en Parral, la ciudad natal de Duarte, un expresidente de la Cámara de Diputados federal del Partido RevolucionarioInstitucional (PRI), la mayor fuerza opositora del país y ampliotriunfador de las elecciones del pasado 4 de julio.
Elasesinato ocurrió casi simultáneamente a un llamado para extremarprecauciones hecho por el gobernador actual de Chihuahua, José Reyes, ala población de Ciudad Juárez, la urbe más violenta del país fronterizacon El Paso, Texas.
Reyes pidió a la genteresguardarse en sus casas después de trabajar, no salir de noche ytransitar por avenidas principales de Ciudad Juárez, donderecientemente narcotraficantes hicieron explotar un coche bomba contrala policía, matando a cuatro personas.
Loscárteles en Ciudad Juárez, donde han sido asesinadas casi 6.000personas desde enero de 2008, han amenazado con hacer explotar máscoches bomba si las autoridades no despiden a policías quesupuestamente están protegiendo a bandas rivales.
Endiversos puntos de la ciudad de Durango, capital del estado del mismonombre, vecino a Chihuahua, fueron encontradas el martes ocho cabezashumanas, dijo el diario Reforma citando a la fiscalía estatal.
Elsábado, autoridades dijeron que localizaron los restos de 51 personaspresuntamente asesinadas por sicarios del narcotráfico en un municipioaledaño a la norteña ciudad de Monterrey tras varios días de buscar conexcavadoras en un amplio terreno de una hacienda abandonada.
Losasesinatos en todo el país por la violencia de los cárteles de lasdrogas suman unos 25.000 desde el inicio de la gestión del presidenteFelipe Calderón en diciembre de 2006, según cifras del Gobierno.