Según cifras de la Defensoría del Pueblo, al menos 462 líderes sociales fueron asesinados entre el 1 de enero de 2016 y el 28 de febrero pasado en Colombia, mientras que una ONG sostiene que son más de 700.
El indígena Enrique Guejia Meza fue asesinado este domingo en el municipio de Toribío, en el departamento del Cauca (suroeste), y su caso se convirtió así en el tercer homicidio de un líder social que ocurre en esa región colombiana en los últimos cuatro días.
Así lo informó la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN), que detalló en un comunicado que el hecho ocurrió cuando desconocidos le dispararon a Guejia Meza, "médico tradicional" y autoridad indígena de la zona.
La asociación señaló que el líder no había recibido amenazas y que portaba su bastón de autoridad, por lo cual creen que su homicidio hace parte de un "plan pistola" que están ejecutando las bandas criminales en la región contra los indígenas. El "plan pistola" es una estrategia utilizada por las bandas criminales para el asesinato selectivo de personas.
El homicidio de Guejia Meza se suma al del líder campesino José Eduardo Tumbó, quien fue asesinado el sábado por desconocidos en una zona rural del municipio de Corinto (Cauca) y había participado en las movilizaciones indígenas de marzo pasado, que bloquearon por varias semanas la vía Panamericana, la principal carretera del suroeste colombiano.
El jueves también fue asesinado el guardia indígena Gersaín Yatacué en una zona rural de Caloto, municipio ubicado también en el Cauca.
Según cifras de la Defensoría del Pueblo, al menos 462 líderes sociales fueron asesinados entre el 1 de enero de 2016 y el 28 de febrero pasado en Colombia.
Mientras que un estudio de la ONG Instituto de Estudios sobre Paz y Desarrollo (Indepaz) y el movimiento político Marcha Patriótica sostiene que ya son más de 700 líderes sociales y 135 excombatientes de las FARC los asesinados desde 2016, año en el que se firmó el acuerdo de paz con esa antigua guerrilla.