"La economía está incuestionablemente en la trayectoria correcta (...) Pero no ha terminado de recuperarse todavía", advirtió Christina Romer.

Washington. La economía estadounidense comenzó a salir de la peor recesión desde la Gran Depresión de la década de 1930 pero aún necesita que el Gobierno federal tome medidas adicionales para combatir la crisis en el mercado de trabajo, dijo el domingo una asesora económica del presidente de Estados Unidos, Barack Obama.

"Lo que necesitamos ahora no es el retiro del apoyo, sino acciones más enfocadas que ayudarán al sector privado a recuperarse con más fuerza", dijo Christina Romer, presidenta del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca, en comentarios preparados para una ceremonia de inicio en College of William and Mary en Williamsburg, Virginia.

El texto con las declaraciones de Romer fue entregado en Washington.

"Me preocupa que los diseñadores de políticas puedan tomar el regreso del crecimiento como una licencia para retirar el apoyo que ha sido esencial en la recuperación", dijo.

Romer exhortó al Congreso a aprobar una serie de medidas propuestas por Obama para reactivar el crecimiento.

Entre esas propuestas se incluye el establecimiento de un fondo de préstamos para estimular el crédito para pequeñas empresas y entregar ayuda a estados y ciudades con fondos destinados a evitar despidos de profesores y otros empleados locales.

Con la tasa de desempleo estadounidense apenas por debajo del 10 por ciento, el Gobierno de Obama intenta lograr el difícil equilibrio entre las medidas para impulsar la economía, y las presiones para disminuir el creciente déficit presupuestario del país.

Obama nominó una comisión fiscal bipartidista que entregará un informe el 1 de diciembre con recomendaciones para reducir el déficit, que se espera llegue a los 1,6 billones de dólares este año.

El último reporte del Gobierno sobre el mercado de empleos mostró que los empleadores agregaron 290.000 trabajos en abril, un ritmo más fuerte del esperado, lo que sugirió que la recuperación económica ganaba terreno.

Pero el índice de desempleo subió dos décimas porcentuales hasta un 9,9 por ciento.

"La economía está incuestionablemente en la trayectoria correcta (...) Pero no ha terminado de recuperarse todavía", dijo Romer en su discurso.

"Para los millones de estadounidenses que siguen esperando ser contratados, siguen esforzándose por abastecer a sus familias y pagar sus hipotecas sin un trabajo, esto sigue siendo una crisis económica", recalcó.