Masood, que nació en Reino Unido y posteriormente se convirtió en musulmán, había figurado en la periferia de anteriores investigaciones sobre terrorismo, lo cual lo situó bajo el radar de la agencia de inteligencia británica MI5.
Antes de que asesinara a cuatro personas en el ataque más mortal perpetrado en Reino Unido desde las bombas que explotaron en Londres en 2005, funcionarios británicos de inteligencia consideraban a Khalid Masood como un delincuente que no suponía una amenaza seria.
Masood, que nació en Reino Unido y posteriormente se convirtió en musulmán, había figurado en la periferia de anteriores investigaciones sobre terrorismo, lo cual lo situó bajo el radar de la agencia de inteligencia británica MI5.
Sin embargo, el hombre de 52 años no estaba siendo investigado cuando condujo el miércoles a gran velocidad a través del puente de Westminster, arremetiendo contra peatones con un vehículo alquilado antes de dirigirse a las cercanías del Parlamento, donde fue abatido tras apuñalar a un policía desarmado.
A pesar de que entre las personas con las que tuvo relación había sospechosos de poder convertirse en combatientes yihadistas en el extranjero, Masood "nunca lo hizo", dijo una fuente gubernamental estadounidense que habló con Reuters bajo condición de anonimato.
El Estado Islámico reivindicó el ataque de Masood, pero no está claro qué vínculos -si es que hay alguno- tenía con el grupo extremista. La policía dijo que no había informaciones de inteligencia previas sobre sus intenciones de llevar a cabo un ataque.
Nacido en Kent, al sureste de Londres, el día de Navidad de 1964, Adrian Russell Ajao -su nombre original- se mudó varias veces y en los últimos tiempos había vivido en Birmingham, en el centro de Inglaterra.
El diario Daily Mail dijo que fue criado por una madre soltera en el pueblo de Rye, en la costa sur de Inglaterra, y que se convirtió después al Islam y se cambió el nombre. Otras informaciones periodísticas indican que estaba casado, era padre de tres hijos y que había sido profesor de inglés aficionado al fisicoculturismo.
Conocido por varios alias, Masood arrastraba una serie de condenas, pero ninguna relacionada con terrorismo, y no está claro cuál era su ocupación profesional. En noviembre de 1983 las autoridades fijaron su atención en él por primera vez, tras ser declarado culpable por vandalismo, mientras que su última condena data de diciembre de 2003, por posesión de un cuchillo.
Se han dado pocos detalles de forma oficial sobre este hombre y qué podría haberle impulsado a llevar a cabo el ataque del miércoles, el más mortal en Reino Unido desde el atentado suicida con bombas de 2005 perpetrado por cuatro jóvenes yihadistas británicos, que acabaron con la vida de 52 personas.
"Nuestra hipótesis de trabajo es que se inspiró en el terrorismo internacional", dijo a la prensa Mark Rowley, jefe de la unidad antiterrorista de la policía británica, quien agregó que los detectives estaban interrogando a nueve personas bajo arresto tras haber realizado dos nuevas detenciones "de carácter significativo" en el centro y el noroeste de Inglaterra.
Masood podría haber alquilado un apartamento situado en las cercanías del área de Edgbaston, en Birmingham, no lejos de las oficinas de Enterprise. Se trata de una de las propiedades que fueron registradas por agentes armados.
En la víspera del ataque, Masood pasó su última noche en un hotel barato de Brighton -en la costa sur del país-, donde pidió un kebab para llevar, dijo el diario Sun.