Un reciente sondeo elaborado por las firmas The Tarrance Group y Bendixen and Amandi indicó que los votantes hispanos registrados en Florida prefieren a Clinton sobre Trump por un 60% contra un 30%.
El hombre que respondió el sábado a la llamada de un voluntario a la puerta de su casa en el barrio de Kendall, en el condado de Miami-Dade, fue enfático al asegurar no solo que iría a votar, sino que "esperamos que la presidenta gane".
Los voluntarios realizaron un último esfuerzo el fin de semana en Florida para animar a que la gente votara por adelantado -proceso que concluyó el domingo-, antes del día de las elecciones del martes, en el que se enfrentan el republicano Donald Trump y la demócrata Hillary Clinton.
Y es que los votantes latinos podrían tener una enorme influencia en los comicios. Los datos de la votación adelantada podrían presagiar un aumento de los votantes hispanos, sobre todo en los estados clave de indecisos en Nevada y Florida, y Clinton podría ser la principal beneficiada.
Los sondeos dan a Clinton un mayor apoyo entre los votantes latinos a nivel nacional. Una encuesta de Washington Post/Univision publicada hace pocos días le asignó el 67% del voto hispano frente al 19% de Trump. El magnate inmobiliario neoyorquino ha obtenido bajas cifras de apoyo en el principal grupo minoritario de Estados Unidos, al que ha molestado frecuentemente con comentarios despectivos.
Un reciente sondeo elaborado por las firmas The Tarrance Group y Bendixen and Amandi indicó que los votantes hispanos registrados en Florida prefieren a Clinton sobre Trump por un 60% contra un 30%. En Nevada la distancia es aún mayor: 72% para Clinton y 19% a Trump.
En Florida, la campaña de Clinton calcula que el voto latino adelantado subió un 139%, o más del doble comparado con 2012, según un reporte fechado el miércoles.
El estratega demócrata Steve Schale, un experto en Florida, calcula que 170.000 hispanos más votaron por adelantado o por correo hasta el miércoles que los que habían sufragado por estos métodos en toda la elección de 2012, según señaló en su blog.
Pese al incremento del voto adelantado, no hay certeza sobre qué candidato prefirió la gente. Tampoco hay garantías de que la mayor participación de los latinos continúe el día de las elecciones ni de que los votantes de otras minorías puedan hacer la diferencia para ganar Florida y otros estados.
Trump puso en marcha su campaña el año pasado describiendo a los inmigrantes mexicanos como violadores y criminales y convirtió su dura postura sobre inmigración en un sello destacado de su visión de Estados Unidos. Pidió la construcción de un muro en la frontera y dijo que un juez federal nacido en Estados Unidos no podía hacer su trabajo porque es descendiente de mexicanos.
Esta retórica podría estar dañándole en una Florida cada vez más diversa, donde muchos observadores electorales creen que Trump debe ganar para tener una oportunidad de asegurarse el mínimo de 270 votos en el Colegio Electoral necesarios para llegar a la Casa Blanca.
Daniel Smith, un politólogo de la Universidad de Florida que también realiza estudios electorales, afirmó que los demócratas tienen un sólido liderazgo entre los hispanos que votaron por adelantado en Florida.
"Desde mi punto de vista, los hispanos en Florida están reaccionando de forma visceral a Donald Trump", dijo Smith. "Su campaña de tierra quemada contra los inmigrantes y, sobre todo, los hispanos le está perjudicando en Florida".