La coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) dijo que, superado este paso de validación, la norma contempla un plazo de 48 horas para solicitar que se reúnan las rúbricas del 20% del total del electorado que finalmente conducirían a la consulta popular.
Caracas. La autoridad electoral de Venezuela dijo este lunes que validó que las firmas recabadas por la oposición superan la barrera del 1% del electorado de cada estado del país, un requisito para avanzar en la convocatoria a un referéndum para revocar el mandato del presidente Nicolás Maduro.
La coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) dijo que, superado este paso, la norma contempla un plazo de 48 horas para solicitar que se reúnan las rúbricas del 20% del total del electorado que finalmente conducirían a la consulta popular.
No obstante, la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, no precisó si la oposición puede activar la recolección de cerca de 4 millones de firmas.
"Los 24 estados cumplieron con los requisitos del 1% (de las firmas)", dijo Lucena a periodistas, al tiempo que detalló que el organismo solicitó al Ministerio Público investigar supuestas irregularidades, como usurpación de identidad, en el 0,33% de los casos.
Luego del anuncio del árbitro electoral, el secretario ejecutivo de la MUD, Jesús Torrealba, dijo que los opositores seguirán el proceso y presentarán en los próximos dos días la solicitud formal para activar la segunda recolección de firmas.
"A partir de ahí, el CNE tiene 15 días para 'deletrear' nuestra carta y considerarla, y desde ese momento tiene que convocar la consulta de, al menos, el 20 por ciento de las voluntades", refirió, agregando que es probable que la convocatoria sea fijada para la primera semana de septiembre.
El líder opositor y ex candidato presidencial Henrique Capriles anunció movilizaciones en todo el país para exigir la activación de la segunda fase.
El 1% de las firmas autorizadas equivale a cerca de 200.000 electores.
La premura de la oposición por hacer el plebiscito este año radica en que, según la Constitución, si se el referendo se realiza en el 2017 y el mandato de Maduro es revocado, el vicepresidente sería el encargado de gobernar hasta el 2019 y no se celebrarían nuevas elecciones.
En el marco de una rápida aceleración de la inflación y escasez de alimentos y medicinas, los adversarios de Maduro buscan revocar su mandato, pero el presidente y sus aliados han dicho en repetidas oportunidades que la consulta popular no se llevará a cabo este año, agregando que posiblemente se realice en el 2017.
El oficialista alcalde de Caracas, Jorge Rodríguez, dijo horas antes del anuncio del CNE que el referéndum estaba "legalmente muerto".
"Porque sencillamente está identificado un gigantesco fraude", sostuvo Rodríguez desde la sede del CNE.