Bachelet habló ante un Congreso en el que la coalición oficialista Nueva Mayoría -en la que hay desde democristianos hasta comunistas- cuenta con una holgada representación que le permitirá sacar adelante la mayoría de las iniciativas anunciadas.
Valparaíso. La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, rindió este miércoles ante el congreso la primera cuenta pública de su segundo mandato, con un discurso centrado en las reformas que pondrá en marcha en materia tributaria y educativa, así como la elaboración de una nueva Constitución.
A sólo dos meses de volver al poder, la mandataria chilena compareció ante diputados y senadores para dar cuenta del cumplimiento de las 56 medidas anunciadas para los primeros cien días de gobierno y trazar la hoja de ruta que seguirá durante su presidencia.
Además, la presidenta abordó las dos catástrofes que han afectado al país en las últimas semanas, el incendio que destruyó una parte de la ciudad portuaria de Valparaíso y los dos terremotos en el extremo norte del país.
Mientras tanto, fuera del Congreso, jóvenes universitarios y de enseñanza secundaria marcharon por las calles de Valparaíso, donde está la sede del Parlamento, para protestar por la reforma educativa anunciada por el Ejecutivo, que a juicio de los estudiantes resulta insuficiente.
La manifestación, que comenzó al mismo tiempo que Bachelet iniciaba su exposición, fue convocada por la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) y también pobladores afectados por el incendio que semanas atrás arrasó varios cerros de Valparaíso.
"Traigo conmigo una gran responsabilidad", conducir al país por un camino de mayor igualdad y oportunidades para todos", dijo la presidenta al comienzo de una sesión de dos horas, que se desarrolló sin incidentes.
Bachelet habló ante un Congreso en el que la coalición oficialista Nueva Mayoría (en la que hay desde democristianos hasta comunistas) cuenta con una holgada representación que le permitirá sacar adelante la mayoría de las iniciativas anunciadas.
"Chile ha cambiado" y "hoy es un país que demanda sus derechos con claridad", señaló la presidenta, quien a renglón seguido admitió: "se percibe un gran descontento por los problemas profundos que no hemos podido solucionar como país".
"Debemos reconocer que hay cambios que son necesarios y urgentes", enfatizó la mandataria quien presentó a los parlamentarios lo que definió como "un programa de gobierno transformador" que "mantendrá lo que ha dado resultado" y para el que pidió el apoyo de "todas las fuerzas políticas y sociales del país".
"Haremos los cambios de manera democrática y transparente, y gobernaremos dialogando con todos los sectores", aseguró.
Además de las reformas tributaria y educativa y el anuncio de una nueva Carta Magna, que forman el eje central de su programa de gobierno, la primera cuenta de la mandataria estuvo marcada por la reconstrucción tras las catástrofes que afectaron recientemente a varias regiones del país.
Durante la sesión conjunta de la Cámara de Diputados y el Senado, la presidenta hizo algunos anuncios destacados, especialmente los proyectos de ley para despenalizar el aborto en determinados supuestos, crear una administradora de fondos de pensiones (AFP) estatal y reconocer el agua como un bien de uso público.
Bachelet también deslizó algunas críticas hacia la administración del presidente Sebastián Piñera (2010-2014), al afirmar que su gobierno ha heredado una economía con un bajo crecimiento.
Además, cuestionó la gestión del anterior Ejecutivo en materia sanitaria y la fallida elaboración de un censo de población 2012 fiable.