Obama presionó por una reforma migratoria en una ceremonia en la que 24 miembros de las fuerzas militares estadounidenses, originarios de China, México, Etiopía y otros países, se convirtieron en ciudadanos estadounidenses.
Washington. El presidente estadounidense, Barack Obama,advirtió el viernes que sin una reforma migratoria federal quedaríaabierta la puerta para "esfuerzos equivocados", como una decisión deArizona que generó dudas sobre el respeto de los derechos civiles.
Obamapresionó por una reforma migratoria en una ceremonia en el Rose Gardende la Casa Blanca, en la que 24 miembros de las fuerzas militaresestadounidenses originarios de China, México, Etiopía y otros países, seconvirtieron en ciudadanos estadounidenses.
"Hoy celebramosla esencia del país que amamos, un Estados Unidos en el que muchos denuestros antepasados llegaron de otro lugar", dijo Obama, cuyo padreera keniata.
"Por lo que en un día como éste también debemosrecordar cómo debemos seguir siendo un país de inmigrantes y un paísbajo el imperio de la ley", dijo el mandatario. "Esto incluye componerel quebrado sistema migratorio de Estados Unidos", agregó.
Loslíderes demócratas del Congreso están evaluando si intentan impulsar en 2010 una reforma migratoria, un tema candente en Estados Unidos,donde unos 10,8 millones de inmigrantes ilegales viven y trabajan enlas sombras.
El Partido Demócrata teme un revés político delos votantes de raíces hispanas en las elecciones legislativas denoviembre por la falta de avances en el tema desde que Obama asumió lapresidencia.
Sin embargo, muchos conservadores se oponen auna flexibilización de las normas para que los inmigrantes ilegales seconviertan en ciudadanos y se quejan de que utilizan recursos y tomanempleos que son de los estadounidenses.
Obama criticó una leyaprobada esta semana por los legisladores del sureño estado de Arizona,vecino a México, que obligará a la policía local a determinar si laspersonas están en Estados Unidos de forma ilegal.
Lagobernadora Jan Brewer, republicana, aún no ha promulgado la ley,mientras que los opositores dicen que es inconstitucional y estánpresionando para que sea vetada.
"Nuestro fracaso en actuar responsablemente a nivel federal abrirá la puerta para la irresponsabilidad de otros", dijo Obama.
"Yeso incluye, por ejemplo, el reciente esfuerzo de Arizona, que amenazócon minar las nociones básicas de equidad que celebramos comoestadounidenses, así como la confianza entre la policía y suscomunidades, que es crucial para mantenernos a salvo", agregó elpresidente.
Los líderes del Congreso han analizado la idea deabordar la cuestión migratoria en 2010, pero tras la dura batallapor la reforma al sistema de salud será difícil que intenten la sanciónde otro tema controvertido antes de las elecciones.