En una carta con fecha del 10 de marzo, Obama elogió la labor de las Damas de Blanco, que marchan semanalmente para protestar contra el gobierno comunista de Cuba, y defendió su política de buscar la normalización de las relaciones con Cuba.
El presidente estadounidense Barack Obama prometió a uno de los grupos de disidentes más destacados de Cuba que planteará los temas de la libertad de expresión y de reunión al presidente cubano Raúl Castro durante su visita del 20 al 22 de marzo a la isla caribeña.
En una carta con fecha del 10 de marzo, Obama elogió la labor de las Damas de Blanco, que marchan semanalmente para protestar contra el gobierno comunista de Cuba, y defendió su política de buscar la normalización de las relaciones con Cuba.
El respaldo estadounidense para los disidentes es una fuente de tensión antes de la visita de Obama, la primera de un presidente estadounidense desde que los rebeldes de Fidel Castro derrocaron a un gobierno pro-estadounidense en 1959.
Luego de más de medio siglo de animosidad inspirada en la Guerra Fría, ambas partes prometieron hace 15 meses normalizar las relaciones.
Las Damas de Blanco criticaron el cambio en la política de Obama, diciendo que el gobierno cubano continúa suprimiendo el disenso al romper manifestaciones antigubernamentales y mantener un monopolio de los medios. Dicen que Cuba tomó medidas aún más fuertes desde el acercamiento con Washington.
"Tomamos seriamente las preocupaciones que usted planteó", dijo la carta de Obama, que la líder del grupo Berta Soler leyó ante alrededor de dos decenas de Damas de Blanco y otros partidarios reunidos en un parque de La Habana.
"Presentaré estas cuestiones directamente al presidente Castro", dijo Obama, quien llamó a las Damas "una inspiración para el movimiento de los derechos humanos en todo el mundo".
Un alto funcionario estadounidense en Washington confirmó que un asesor de Obama entregó la carta a las Damas de Blanco en Miami.
Como en las marchas durante la mayor parte del año pasado, una manifestación del domingo terminó con la policía deteniendo a los participantes después de que los cruzó un grupo mayor, de partidarios del gobierno.
La policía detuvo a unas dos decenas de personas, y en ese momento las calles se llenaron de bailarines de conga y gente que tocaba tambores, que lideraban a cientos de manifestantes a favor del gobierno en su propia marcha.
Las marchas y detenciones semanales son normales pero la línea de la conga fue una aparición adicional una semana antes de la visita de Obama.
Soler dio la bienvenida a la carta de Obama pero igualmente se mostró en desacuerdo con él por aplicar cambios unilaterales sin movimientos recíprocos de parte de Cuba.
"La respuesta de esta carta para nosotras es positiva y se la agredecemos mucho", dijo Soler minutos antes de ser detenida.