Mario Cossío, quien se encuentra en Paraguay, cuenta con un “refugio provisorio”, y “la interposición de una solicitud de reconocimiento de la condición de refugiado suspende la tramitación de cualquier solicitud de extradición”, indicó el representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas.
La Paz. El “refugio provisorio” concedido al suspendido gobernador de Tarija, Mario Cossío, suspende la tramitación de cualquier solicitud de extradición en su contra, hasta tanto se tome una decisión final sobre su pedido de refugio político, informó la Comisión Nacional del Refugiado (Conare).
El representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados ante la Conare, Rodolfo Aseretto, explicó que el documento que se entregó al ciudadano boliviano le permite gozar de todos lo derechos que tiene un refugiado político.
“Este señor (Cossío) está amparado por la Ley 1938/02, que en su artículo 24 dice que la interposición de una solicitud de reconocimiento de la condición de refugiado suspende la tramitación de cualquier solicitud de extradición hasta tanto sea resuelto el pedido de refugio por la Conare”, afirmó Aseretto en declaraciones publicadas por el diario ABC, de Asunción.
La suspendida autoridad salió de Bolivia luego de que la Asamblea de Tarija, el 15 de diciembre, lo suspendiera del cargo en atención al pedido del fiscal Gilbert Muñoz, quien lo acusa de un daño económico de Bs 1,3 millones por la compra de asfalto. El 22 de diciembre, en Asunción, se le concedió el refugio provisorio.
La justicia, este lunes, declaró rebelde al acusado y ordenó su aprehensión nacional. Muñoz explicó que, a partir de la decisión judicial, la Fiscalía General tramitará la captura y extradición de la autoridad. “El pedido de refugio está en proceso de estudio, mientras tanto tiene los mismos derechos que un refugiado. Esto hasta que el comité resuelva el tema”, insistió el representante de NNUU.
La presencia y el pedido del gobernador suspendido en Paraguay también provocó repercusiones en el ámbito político. Según un reporte de ABC, existen “varios” partidos de izquierda que se manifestaron en contra de otorgar el refugio.
Para la diputada oficialista y presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de Diputados, Aída Robles, no amerita dar asilo político al acusado, porque, según las informaciones que maneja, el ex funcionario está acusado de mala administración.
La legisladora, miembro de la Conare, calificó la situación de “complicada”. En contraposición, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado paraguayo, Miguel Abdón Saguier (oficialista), consideró este martes que “el pedido de refugio debe ser concedido sin más trámite en base a las normativas consagradas en la ley general sobre refugiados”. La Conare tiene 90 días para pronunciarse sobre la solicitud. Cossío se declaró un perseguido político.
Denuncia dictadura. Mario Cossío fue suspendido de su cargo el 15 de diciembre por la Asamblea Legislativa Departamental de Tarija, debido a una acusación formal por parte del fiscal Gilbert Muñoz. Es acusado de más de una veintena de caso vinculados con la corrupción, que representarían un daño económico de más de US$39 millones. En una entrevista concedida al periódico paraguayo ABC denunció que fue derrocado por la dictadura y que su vida corría peligro en Bolivia.
“Yo sigo siendo gobernador. Me sacaron del cargo, pero sigo siendo gobernador. Me sacaron físicamente del cargo, pero ante la Constitución y ante la voluntad popular sigo siendo el gobernador. Lo que hay en Tarija hoy es un interventor impuesto por la dictadura”, afirmó. También explicó que se le inició un proceso por no haber ejecutado una póliza de seguros que no excede los US$190.000.
Cossío está a la espera del resultado de su solicitud de refugio político.