En una transmisión realizada a través de Facebook, Bolsonaro alertó sobre el déficit que tiene la Seguridad Social brasileña y dijo que ello puede complicar mucho al país.
Rio de Janeiro.- El presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, defendió la reforma de Seguridad Social en la que se prevé la eliminación de algunos derechos de los trabajadores para generar más puestos de trabajo.
En una transmisión en directo realizada a través de Facebook, Bolsonaro alertó sobre el déficit que tiene la Seguridad Social brasileña y dijo que ello puede complicar mucho al país.
"Todos tienen que entender que la cuestión de la Seguridad Social es complicada. Brasil tiene derechos para todo, pero no tiene empleo", dijo al señalar que quiere "dar más derechos para todos, pero Brasil está llegando al límite en la cuestión presupuestaria".
La reforma de la Seguridad Social es considerada clave para sanear las maltrechas cuentas públicas brasileñas, aunque cuenta con una gran oposición en el Congreso que ha impedido que sea aprobada hasta el momento.
El presidente brasileño, Michel Temer, intentó elevar sin éxito la edad de jubilación el año pasado por no lograr el apoyo necesario, por lo que probablemente será la futura administración de Bolsonaro la encargada de concretar la polémica reforma.
El presidente electo dijo que no pretende quitar derechos laborales garantizados por la Constitución.
"Está lleno de derechos laborales en la Constitución, no tengo como quitarlos. Pero hoy hay muchos derechos y no hay empleo (...) Lo que quiero es acabar con el desempleo", agregó.
Bolsonaro dijo que confía plenamente en su futuro ministro de Economía, Paulo Guedes, para reflotar la mayor economía de América Latina.
El futuro presidente de Brasil prometió dureza contra los ambientalistas y dijo que él mismo designará en los próximos días al futuro ministro de Medio Ambiente.
"Los quiero trabajando de verdad, y no trabajando por intereses. Ustedes, del medio ambiente, no saben lo difícil que es producir", argumentó.
Bolsonaro mostró interés en permitir que algunas empresas exploren los recursos naturales de la Amazonia, al proponer un "acuerdo" para explorar la región "sin interés ideológico", al tiempo que defendió el turismo en áreas protegidas.
