El Palacio de Planalto, sede del gobierno en Brasilia, difundió que las modificaciones las determinó el presidente Bolsonaro "a partir de los cuestionamientos hechos ante el Poder Judicial, en el ámbito del Poder Legislativo y por la sociedad en general".
Brasilia. El gobierno de Brasil publicó este miércoles en el Diario Oficial un nuevo decreto sobre armas de fuego, que modifica la disposición de inicios de mes, por lo que queda vetado a ciudadanos comunes portar fusiles, carabinas o escopetas.
El nuevo decreto, firmado por el presidente Jair Bolsonaro, modifica las reglas del decreto del pasado 7 de mayo sobre adquisición, registro, posesión, tenencia y comercialización de armas de fuego en Brasil.
El Palacio de Planalto, sede del gobierno en Brasilia, difundió que las modificaciones las determinó el presidente Bolsonaro "a partir de los cuestionamientos hechos ante el Poder Judicial, en el ámbito del Poder Legislativo y por la sociedad en general".
Se hicieron además rectificaciones al decreto original, lo que según la Presidencia corrige errores meramente de forma en el texto, como numeración duplicada de dispositivos y puntuación, entre otros.
Los cambios surgieron luego de críticas al decreto original, en especial la que surgió de 14 gobernadores de los estados con más violencia en el país sudamericano, quienes el martes pidieron la revocación de la norma.
Portar armas en zonas rurales ahora solo estará autorizado para quienes posean inmuebles ahí y se dediquen a explotación agrícola, ganadera, extractiva, forestal o agroindustrial.
Anteriormente, el decreto era más amplio en ese sentido y establecía que los residentes de áreas rurales podían solicitar la autorización para portar armas de fuego.
El texto cita ahora que la práctica de tiro deportivo es permitida a partir de los 14 años de edad con autorización de un responsable, mientras que el decreto anterior decía que la práctica estaba permitida a menores de 18 años.
El decreto publicado a inicios de mayo facilitaba portar armas a un conjunto de ocupaciones como abogados, camioneros y políticos electos, además de coleccionistas, instructores de tiro, periodistas de fuente policial y agentes de tránsito, entre otras.
