"Quedó mareado tras el golpe y se sometió a un examen médico inicial, donde los médicos sugirieron una tomografía computarizada y reposo", comunicó la asesoría de prensa del opositor.

Río de Janeiro. El candidato opositor a la presidencia de Brasil, José Serra, fue alcanzado en la cabeza por un objeto este miércoles en Río de Janeiro cuando sus partidarios se enfrentaron con seguidores de su rival del partido oficialista durante un evento de campaña.

Serra, de 68 años, no resultó herido por el proyectil, que los medios dijeron que era un rollo de cinta adhesiva, pero suspendió el resto de sus actividades programadas en Río de Janeiro.

"En determinado momento, alcanzaron al candidato Serra en la cabeza con un pesado objeto", dijo la asesoría de prensa del opositor.

"Quedó mareado tras el golpe y se sometió a un examen médico inicial, donde los médicos sugirieron una tomografía computarizada y reposo", agregó el comunicado de prensa.

El incidente es una señal del nivel de agresividad que al que ha llegado el duelo entre Serra, del opositor Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), y Dilma Rousseff, la abanderada del oficialista Partido de los Trabajadores (PT), a menos de dos semanas del balotaje del 31 de octubre.

Serra ha reducido de más de 20 a hasta 4 puntos porcentuales la brecha que lo separaba de Rousseff, quien estuvo cerca de ganar los comicios en primera vuelta el 3 de octubre.

"Esta es la tropa de asalto del Partido de los Trabajadores (PT)", dijo Serra. "¿Se acuerdan de la tropa de asalto de los nazis? Eso es típico de los fascistas", agregó.

El ex gobernador del estado de Sao Paulo se refugió en una tienda de cosméticos en la región de Campo Grande, en las afueras de la zona oeste de Río de Janeiro, mientras los grupos rivales se enfrentaban en la calle.

"Yo estaba abrazando a Serra cuando fue alcanzado en la cabeza por un rollo de cinta adhesiva", dijo Paulo Cesar Gomez, un pastor cristiano evangélico, según el sitio web de noticias de la red Globo.

Serra ha estado cortejando a los votantes religiosos desde la primera ronda, en la que se cree que las críticas de evangélicos y católicos romanos a las opiniones de Rousseff sobre temas sociales le costaron votos a la candidata oficialista.