Brasil espera que el canciller de Honduras, Mario Canahuati, visite el país para concretar un acuerdo para la generación de energía a través de biomasa, y que una misión brasileña visite el territorio hondureño para trabajar en conjunto con instituciones hondureñas del sector de los combustibles.
Tegucigalpa, Honduras. El gobierno de Brasil donará de forma inmediata unas13 mil toneladas de alimentos a Honduras para el programa de merienda escolar.
El anuncio fue hecho por el vicecancilller brasileño para América del Sur, Centroamérica y el caribe, Antonio Ferreira, durante una reunión con el presidente de Honduras, Porfirio Lobo Sosa.
"Es un proyecto que no sólo se trata de donar nada más, sino de traspasar la exitosa experiencia que tuvo Brasil en crear una merienda digna", dijo Ferreira en conferencia de prensa.
El diplomático, quien se hizo acompañar por otros funcionarios de su país, transmitió a "Pepe" Lobo la voluntad del gobierno de Dilma Rousseff para extender la cooperación en materia de energía, turismo y seguridad, de acuerdo a fuentes de Casa Presidencial.
Brasil espera que el canciller de Honduras, Mario Canahuati, realice una visita a ese país para concretar un acuerdo de cooperación entre ambas naciones, que incluye proyectos para la generación de energía a través de biomasa y en los próximos meses se prevé que una misión brasileña visite el territorio nacional para trabajar en conjunto con instituciones hondureñas relacionadas con el sector de combustibles.
Por su parte, Canahuati agradeció la visita de Ferreira e indicó que su reunión con Lobo fue "muy positiva y provechosa para Honduras".
Brasil restableció relaciones con Honduras en mayo, solicitando el beneplácito para su nuevo embajador y 17 días después de que el país fuera reincorporado a la Organización de Estados Americanos (OEA), la presidenta Rouseff informó que el delegado sería Zenik Krawctschuk, quien se venía desempeñando como encargado de negocios en la sede diplomática de Tegucigalpa.
Las relaciones entre ambos países se suspendieron a raíz de la crisis política, con la separación del poder del expresidente Manuel Zelaya, quien por más de cuatro meses permaneció refugiado en la embajada brasileña en la capital de Honduras.