Los países, que actuaron como mediadores para encontrar una salida a la crisis, reaccionaron ante el borrador anunciado por Washington para imponer sanciones a Teherán por su plan nuclear.
Río de Janeiro. Brasil solicitó este miércoles al Consejo de Seguridad de la ONU, a través de una carta, que le dé una oportunidad de negociación a Irán y que evite "medidas perjudiciales a una solución pacífica para el tema" de su programa nuclear.
Brasil y Turquía mediaron un acuerdo con Irán el 17 de mayo en Teherán, en virtud del cual la república islámica enviará al extranjero 1.200 kilos de uranio levemente enriquecido a cambio de 120 kilos de combustible nuclear para un reactor de investigaciones médicas en el país.
Un grupo de potencias mundiales, encabezadas por Estados Unidos, anunció el martes un borrador de una resolución con nuevas sanciones del Consejo de Seguridad contra Irán e instituciones de ese país por negarse a interrumpir las actividades nucleares.
"Tenemos total confianza de que las cinco potencias más uno van a revisar la declaración conjunta con una visión para abrir camino (...) considerando cuestiones relacionadas al programa nuclear iraní y cosas más amplias de preocupación mutua, por medio de un diálogo constructivo", afirmó la carta firmada por Brasil y Turquía.
Las cinco potencias más uno son los países que son miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU -Estados Unidos, Rusia, Gran Bretaña, Francia y China- más Alemania.
Turquía y Brasil son miembros no permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
El ministro de Relaciones Exteriores, Celso Amorim, dijo el martes a la prensa que quienes no aprovechen la oportunidad de una solución negociada "asumirán sus responsabilidades", en referencia a las potencias favorables a nuevas sanciones.
El acuerdo mediado por Brasil y Turquía tenía como objetivo evitar una nueva ronda de sanciones contra la república islámica.
Autoridades estadounidenses, en tanto, alegaron que Irán sólo busca ganar tiempo.
Después del anuncio del acuerdo, Irán dijo que pretendía seguir enriqueciendo uranio, con lo que aumentó las sospechas de que su programa nuclear no tiene fines pacíficos.
La declaración conjunta, firmada por los tres países, fue enviada el miércoles a los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, según un comunicado de la cancillería brasileña.
De acuerdo a la carta, el acuerdo de canje de combustible nuclear dará la "oportunidad de comenzar un proceso con el objetivo de crear una atmósfera positiva, constructiva y de no confrontación que lleve a una era de integración y cooperación".