El canciller cubano, Bruno Rodríguez, conversó con Cheryl Mills, jefa de gabinete de la secretaria de Estado, Hillary Clinton, durante una conferencia de la ONU para ayudar a Haití tras el devastador terremoto.
La Habana. Cuba y Estados Unidos, en el peor momento desus relaciones bajo el gobierno del presidente Barack Obama,sostuvieron una inusual reunión de alto nivel para coordinar susesfuerzos por la reconstrucción de Haití.
El cancillercubano, Bruno Rodríguez, conversó este miércoles en Nueva York con CherylMills, jefa de gabinete de la secretaria de Estado Hillary Clinton,durante una conferencia de la ONU para ayudar a Haití tras eldevastador terremoto de enero que dejó 1,2 millones de personas sinhogar.
"El encuentro se centró en la reconstrucción del sistema de salud de Haití", dijo la agencia estatal cubana Prensa Latina.
Nohubo más detalles sobre la reunión, una de las de mayor nivel sostenidapor el canciller cubano con un funcionario de la administración Obama.
Elportavoz del Departamento de Estado, P.J. Crowley, declaró que lareunión fue para asegurar que la asistencia que Estados Unidos y Cubaprestan a Haití fluya coordinadamente.
Pero durante elencuentro, Mills planteó la preocupación de Washington por la detencióndesde diciembre pasado en Cuba de un contratista que, según haninsinuado autoridades de la isla, trabajaba para los servicios deinteligencia estadounidenses.
"Creo que en el curso de la conversación planteamos el caso de Allan Gross. Eso fue parte de la conversación", dijo Crowley.
Elcaso de Gross, que según Estados Unidos no es un agente y estaba enCuba sólo para facilitar el acceso a internet de grupos judíos, es unode los episodios que deterioraron las relaciones entre ambas naciones.
Cubay Estados Unidos, enemistados desde hace ya medio siglo, dieron el añopasado tímidos pasos de acercamiento con la llegada al poder de Obama,que prometió relanzar los vínculos con la isla de Gobierno comunista.
Perouna serie de tropiezos como la detención de Gross y la muerte enfebrero del preso político en huelga de hambre Orlando Zapata,parecieron arruinar el nuevo comienzo.
Cuba dice que Obamaestá empeñado en destruir su sistema socialista, igual que susantecesores. Estados Unidos dice que La Habana no ha hecho nada pormejorar los derechos humanos.
La reconstrucción de Haití es un punto de contacto entre ambas naciones.
Cuba autorizó en enero el uso de su espacio aéreo para los vuelos estadounidenses de evacuación desde Haití.
Los dos países dijeron estar dispuestos a colaborar en otras áreas en Puerto Príncipe, pero hasta ahora no dieron más pasos.
Cuba tenía 400 médicos trabajando en Haití cuando el sismo demolió Puerto Príncipe el 12 de enero.
Desdeentonces cuatriplicó la cifra y cuenta hoy con 1.700 médicos cubanos,haitianos y de otras nacionalidades formados en la isla.