Gonzalo Gutiérrez dijo, que dicho compromiso debe ser el “siguiente paso”, tras las satisfacciones que el Perú espera recibir de Chile por el espionaje.
El Perú quiere el compromiso formal de Chile de que actos nefastos como el espionaje nunca se repetirán, aseguró la noche del domingo el canciller Gonzalo Gutiérrez.
Según dijo, dicho compromiso debe ser el “siguiente paso”, tras las satisfacciones que el Perú espera recibir de Chile por el espionaje.
“Esta es una crisis que tenemos que superar con una satisfacción al Perú, pero el siguiente paso es que queremos un compromiso de que este tipo de actos no se repetirá”, manifestó en el programa Cuarto Poder.
El titular de Torre Tagle refirió que esta crisis también es una oportunidad para "limpiar la mesa" de las relaciones bilaterales, lo cual se lograría si Chile establece el compromiso de no espiar al Perú.
"Esta es una oportunidad de limpiar la mesa, para que por fin las relaciones entre dos países puedan (...) erradicar de una vez por todas este tipo de prácticas que son nefastas y que no hacen a una relación madura, una relación moderna", puntualizó.
Ratificó que no hay plazo para el retorno del embajador Fernando Rojas a Chile, pues ello está supeditado a la respuesta satisfactoria esperada por el Perú.
"No hay ninguna fijación de tiempo sobre esto, esperamos que sea en el tiempo más corto posible, porque nosotros queremos superar esta situación, no es positivo para las relaciones entre los dos países mantener este estado de cosas, pero el Perú requiere de la manera más enérgica que se le presenten las explicaciones de un hecho que es incontroversial", afirmó.
Perú dispuso el retiró temporal de su embajador en Chile -quien ya había sido llamado en consulta a raíz de este caso- mientras no reciba una respuesta satisfactoria de Santiago.
Descartó, además, la posibilidad de dar a conocer la respuesta de Chile porque la reserva permite una comunicación fluida a nivel diplomático; y porque la difusión de esos documentos podría hacer más rígidas las posiciones.
Asimismo, el diplomático evitó comentar qué sentido debería tener la respuesta chilena.
"No voy a limitar la capacidad de opciones que tiene la diplomacia; la diplomacia consiste en matices y esos matices pueden permitir (una) diferente calidad y precisión de respuesta; puede haber varias respuestas correctas, pero no nos centremos solamente en una para no cerrarle la posibilidad a otras", señaló.
Además, por tratarse de un tema judicial, evitó pronunciarse sobre la posibilidad de extraditar al militar chileno Francisco Calvanese Oyarzun,identificado como la persona que contactó a los marinos peruanos para consumar el espionaje.
También señaló que la revisión de los acuerdos comerciales con Chile es una opinión personal y respetable del congresista Daniel Abugattás, que no forma parte de la política exterior del presidente Ollanta Humala con respecto a ese país.
Finalmente, reiteró que no hay ninguna división en la posición peruana con respecto a este caso, porque la política exterior la dirige constitucionalmente el presidente Ollanta Humala, con la asesoría de la Cancillería.