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Candidato del oficialismo continúa liderando resultados en estado clave de México
Lunes, Junio 5, 2017 - 09:13

El candidato del PRI, Alfredo Del Mazo, mantenía una leve ventaja sobre su rival Delfina Gómez. Del Mazo tiene 33,70% de los votos frente al 30,81% de votos obtenidos por la candidata de Morena.

El Partido Revolucionario Institutcional mantenía el lunes una leve ventaja en la elección para gobernador del emblemático Estado de México, que ha controlado por casi nueve décadas, frente a la izquierda liderada por Andrés Manuel López Obrador, quien aspira a ganar los comicios presidenciales del 2018.

Con 97.85% de las actas contabilizadas, el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alfredo Del Mazo, obtenía 33.70% de los votos frente al 30.81% de su rival Delfina Gómez, del izquierdista Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA).

Una proyección oficial del instituto electoral del estado indicó la noche del domingo que Del Mazo terminaría recibiendo entre el 32,75% y el 33,59% de los votos, mientras que Gómez no obtendría más de 31,53%.

Lo cerrado del resultado anticipa una batalla judicial por la elección desde el momento en que López Obrador, líder de MORENA, rechazó los resultados preliminares y dijo que según sus recuentos Gómez ganó la elección.

"Salen a dar un golpe diciendo que Del Mazo va arriba, es mentira, vamos a defender los votos de los ciudadanos del Estado de México acta por acta, casilla por casilla, no vamos nosotros a claudicar tenemos que defender la democracia", dijo en un mensaje grabado y transmitido por redes sociales. Pero aclaró que no apelará a la violencia.

López Obrador, un veterano político adorado por millones pero rechazado por quienes lo ven como un líder populista, denunció fraude en las elecciones del 2006, cuando perdió por 0.56% de los votos frente a su rival Felipe Calderón.

De confirmarse el resultado, sería un respiro para el partido del presidente Enrique Peña Nieto, cuya popularidad está en mínimos históricos por unos escándalos de corrupción, un recrudecimiento de la violencia ligada al narcotráfico y la debilidad de la economía.

Acusaciones contra el PRI. El PRI nunca estuvo tan cerca de perder el central Estado de México, su principal bastión. Sus críticos aseguran que desvía recursos públicos para enriquecerse y manipula al electorado con la compra de votos y entrega de dádivas, pese a que la mitad de la población vive en la pobreza.

"Qué horror, no lo puedo creer. Ya sabe que los del PRI siempre hacen sus transas, son unos corruptos", acusó una desilusionada ama de casa de 47 años, Esperanza Martínez, quien esperaba que ganara Delfina Gómez.

El Estado de México, que rodea la capital, es el más poblado del país con 16 millones de habitantes y el que más aporta a la economía después de la Ciudad de México, pero también es la región con más homicidios y secuestros.

Tras la elección, otros partidos de oposición como el conservador Partido Acción Nacional (PAN) y el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) dijeron que el PRI echó mano de prácticas ilegales para ganar la votación.

El senador izquierdista Alejandro Encinas dijo la semana pasada que en la elección anterior, cuando él fue candidato para gobernador del Estado de México, el PRI compraba a los funcionarios de casillas para que se quedaran en casa.

El partido gobernante ha negado las acusaciones.

"Juntos ya detuvimos el avance del populismo autoritario que representa MORENA y López Obrador en el Estado de México y juntos los detendremos de nuevo en 2018 en la elección presidencial que vamos a ganar", dijo tras la difusión de los primeros resultados el presidente del PRI, Enrique Ochoa.

Tras la difusión de las cifras preliminares más recientes sobre el resultado de los comicios, el peso mexicano revertía pérdidas iniciales y avanzaba casi un 2.0% a su mejor nivel en siete meses.

Autores

Reuters