"Ya veremos qué hacemos desde el punto de vista político, está agarrando mucha fuerza eso de activar un referéndum revocatorio contra ese grupo de diputados", indicó Henrique Capriles, en referencia los parlamentarios que agredieron a sus pares este martes en el congreso.
Caracas, EFE. El líder de la oposición venezolana, Henrique Capriles, aseguró este viernes que la posibilidad de un referéndum revocatorio para adelantar las elecciones legislativas está agarrando "mucha fuerza" y formará parte del debate.
"Ya veremos qué hacemos desde el punto de vista político, está agarrando mucha fuerza eso de activar un referéndum revocatorio contra ese grupo de diputados", indicó Capriles durante un "Acto de Desagravio" a los legisladores opositores que fueron agredidos esta semana en la Asamblea Nacional (AN).
Varios diputados de la oposición y del chavismo fueron agredidos esta semana en la Asamblea Nacional durante una trifulca que se formó después de que el presidente del Parlamento, Diosdado Cabello, volviera a negar el derecho de palabra a los adversarios del gobierno por no reconocer a Nicolás Maduro como presidente.
Los parlamentarios opositores mostraron una pancarta denunciando un "Golpe al Parlamento" y sacaron bocinas y silbatos antes de que se produjera la agresión.
Uno de los que salieron pero parados fue el parlamentario del partido Primero Justicia, de Capriles, Julio Borges, quien fue brutalmente golpeado.
"Yo les aseguro que si aquí se convocara a un referéndum para preguntarle a nuestro pueblo si quiere que se renueve, que haya una renovación en esa AN, yo me atrevo a decirles que votaría el 80 o el 90% del país para que se adelantaran las elecciones en la AN", indicó.
El líder opositor, que ayer impugnó las elecciones del pasado 14 de abril, indicó que la AN "es la casa del debate, ese no es un ring de boxeo y el país no es tonto, los venezolanos no son tontos".
"Este poder legislativo, eso que vimos allí, nos han hecho sentir vergüenza a los venezolanos, pero no solamente vergüenza entre nosotros mismos sino además la imagen que proyectamos al mundo", afirmó.
El líder opositor dijo que esto es incluso una lucha espiritual "entre lo divino y lo satánico".
"Satanás anda por allí, ese que se atrevió a ir a agredir a un hermano diputado, ese tiene a Satanás dentro, porque solamente una persona que tenga al diablo dentro hace eso", afirmó.
Capriles pidió a los diputados de la oposición que retomen la agenda y lleven a la AN las "leyes que son importantes" y que retomen la agenda de hacer asambleas en las calles escuchando al pueblo y recoger firmas para hacer normas.
Pidió "dejarlos solos" a los legisladores del oficialismo y "no actuar igual".
"Nunca actuar igual, jamás, porque el que apela a la violencia le tiene miedo al debate a las ideas y nuestro debate es ese, debate de ideas de propuestas", afirmó.
"Este golpe ha sido un golpe duro pero aquí estamos de pie nuevamente", agregó.
La Constitución venezolana prevé la posibilidad de revocar el mandato de todos los cargos públicos una vez transcurrido la mitad del período para el cual fueron elegidos.
La actual Asamblea Nacional fue elegida en septiembre de 2010 y tomó posesión en enero de 2011 por un periodo de cinco años.
Venezuela se encuentra sumida en una crisis política desde las elecciones del 14 de abril, ganadas por Maduro por estrecho margen, un resultado que Capriles primero pidió auditar en un 100% y que, ante la decisión del Consejo Nacional Electoral de revisar pero sin comprobar los cuadernos de votación, optó por impugnar.