El 40% de los periodistas asesinados en 2015 por ejercer su profesión (28 de 69) fue víctima de grupos terroristas como Al Qaeda o el Estado Islámico, según el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ).

Un informe presentado por el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), contabilizó 69 asesinatos. En forma simultánea, Reporteros sin Fronteras (RSF) publicó hoy en su balance anual que 67 periodistas murieron mientras desempañaban su trabajo, "uno más que en 2014". En tanto, en 43 casos se desconoce aún el motivo de su muerte.

Según RSF, también fueron asesinados este año en todo el mundo 27 periodistas ciudadanos y siete trabajadores de medios de comunicación comunitarios.

Siria y Francia. Al igual que en 2014, el país más peligroso para ejercer la profesión fue Siria, a pesar de que el número de reporteros muertos descendió levemente. Esto se explica debido a que en ese país los periodistas ya no ejercen su labor y los medios de comunicación extranjeros prácticamente no envían a sus reporteros a la zona de conflicto.

A la lista de países con más periodistas asesinados se sumó esta vez Francia. "Los atentados parisinos contra la revista Charlie Hebdo son característicos para las nuevas tendencias mundiales: casi dos tercios de los periodistas a los que mataron este año no estaban en zonas de conflicto", dice el informe de RSF. En 43 casos se desconocen aún los motivos por los que los mataron.

México y Brasil. En lo tocante a Latinoamérica, la situación es inquietante en países como México. Según Reporteros sin Fronteras, en Estados como Oaxaca o Veracruz los periodistas están en la mira de "mafias y de personalidades políticas locales cuando denuncian la corrupción", indicó RSF. Uno de los asesinatos de periodistas que marcaron 2015 en ese país -recuerda RSF- es la ejecución del reportero gráfico mexicano Rubén Espinosa, encontrado con signos de tortura junto a cuatro mujeres en un apartamento de la ciudad de México, adonde había huido desde Veracruz por amenazas de muerte.

También Brasil, Bangladesh, Sudán del Sur y Yemen suman respectivamente al menos cinco periodistas muertos de forma violenta. El informe del CPJ destaca el asesinato del locutor radiofónico brasileño Gleydson Carvalho, muerto a tiros mientras dirigía su programa de radio, muy crítico con los policías locales y los políticos brasileños, a los que acusó repetidas veces de prácticas corruptas. En Brasil este año murieron seis informadores, la cifra más elevada en el país sudamericano desde que el CPJ empezó a realizar este informe anual en 1992.

Llamado a la ONU. "Es imperativo dotarse de un mecanismo concreto para la aplicación del derecho internacional sobre la protección de los periodistas", declaró el secretario general de Reporteros Sin Fronteras, Christophe Deloire.

La organización destacó una doble amenaza para la prensa: "grupos no estatales” que perpetran extorsiones, pero también "muchos Estados que no respetan sus obligaciones internacionales". Por eso considera imperativo que las Naciones Unidas designen a un "representante especial" para la protección de los periodistas.