El Gobierno acusa al organismo regional de injerencia en asuntos internos y de ser "instrumento represivo del imperialismo".
Caracas.- El gobierno de Venezuela se dio un baño de masas este sábado al convocar a una tumultuosa manifestación en Caracas para respaldar la decisión del presidente Nicolás Maduro de abandonar la Organización de Estados Americanos (OEA), una gestión que comenzó hace dos años, cuando Caracas inició el protocolo para abandonar el ente regional, al que acusa de injerencia en asuntos internos.
"Desde hoy la República Bolivariana de Venezuela no pertenece a la OEA, estamos fuera de la OEA por voluntad del pueblo soberano de Venezuela", dijo el canciller Jorge Arreaza en un encendido discurso ante miles de seguidores, antes de aseverar que la decisión es "históricamente correcta", además de "fundamental” para el país. La OEA, sin embargo, no reconoce al gobierno de Maduro y tiene como representante del país a Gustavo Tarre Briceño, enviado del líder opositor Juan Guaidó.
En tanto, Diosdado Cabello, presidente de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente (ANC), aseguró que por culpa del embargo contra Venezuela "más de 40 mil venezolanos han muerto”, debido a que la cantidad de dinero retenida impide la compra de medicinas. Añadió que "la OEA se ha convertido en el instrumento represivo más grande del imperialismo” y adelantó que el 27 de abril será decretado como "día de júbilo nacional” por la ANC.
"Dictadura derrotada”. El canciller Arreaza, en tanto, también cargó contra el secretario general de la OEA, el uruguayo Luis Almagro, a quien calificó como "sicario", al tiempo que aseveró que toda Venezuela se movilizó este sábado "en defensa de su independencia, de su soberanía (y) de su Constitución", aunque las manifestaciones se celebraron solamente en Caracas. Recordemos que, a solicitud de Guaidó, la OEA dejó sin efecto la salida de Venezuela del organismo.
En otra zona de la capital, en una manifestación menos numerosa, la oposición se congregó para ir preparando el ambiente de cara a la masiva movilización convocada para el 1 de mayo. Juan Guaidó acusó que su entorno está siendo perseguido por el Gobierno, luego de que once de sus colaboradores fueran citados por el Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin). "La dictadura está derrotada, solo le queda la persecución”, dijo un disfónico Guaidó.