Al producirse el temblor (las 20:46 hora local, 23:46 GMT), la presidenta de Chile, quien estaba en la sede de Gobierno, convocó a una reunión urgente a los ministros secretario general de Gobierno, Álvaro Elizalde, y secretario general de la Presidencia, Ximena Rincón.
Santiago de Chile. La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, suspendió este martes las actividades oficiales previstas para este miércoles a causa del terremoto de 8,2 grados Richter que sacudió el norte del país y que provocó dos muertos y tres heridos graves, además de la evacuación masiva de todo el litoral chileno.
Al producirse el temblor (las 20:46 hora local, 23:46 GMT), Bachelet, quien estaba en la sede de Gobierno, convocó a una reunión urgente a los ministros secretario general de Gobierno, Álvaro Elizalde, y secretario general de la Presidencia, Ximena Rincón.
En tanto, el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, quien se encontraba en Valparaíso, ciudad portuaria situada a 125 kilómetros de Santiago donde funciona el Parlamento, se trasladó a la capital para coordinar el operativo desde la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi).
Bachelet tenía previsto inaugurar este miércoles a primera hora la XVII Cumbre Judicial Iberoamericana, en la que participan representantes del poder judicial de 23 países que durante tres días tratarán sobre transparencia, cooperación internacional igualdad de género.
En su lugar, según informó el diario digital Emol, la mandataria chilena evalúa la posibilidad de viajar este miércoles a la zona de la catástrofe, para conocer en terreno los daños y las medidas que se están implementando para ayudar a la población afectada.
El operativo para hacer frente a lo sucedido, incluida la evacuación masiva y urgente de todas las personas que viven al borde del mar en este país de 5.300 kilómetros de largo, está siendo coordinado por el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, desde la Onemi.
Tras el terremoto ocurrido el 27 de febrero de 2010, que dejó más de medio millar de muertos y que afectó a la mitad del territorio chileno, sectores políticos de la oposición criticaron duramente a las autoridades de la época.
La catástrofe, que se produjo cuando el anterior gobierno de Bachelet llegaba a su fin, se vio acrecentada porque el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) levantó la alerta de un tsunami que finalmente sí se produjo y que elevó el numero de víctimas mortales.
Algunos representantes de la derecha, que estaba a punto de acceder al poder en aquellos días, acusaron a Bachelet de inacción y de no recurrir a los militares para resguardar el orden público en algunas zonas, que se vieron afectadas por saqueos.
Además de la comisión de investigación parlamentaria impulsada por los congresistas conservadores, algunos familiares de víctimas intentaron en varias ocasiones que la Justicia procesase a Bachelet, petición que fue desestimada por los jueces.
El ministro Peñailillo anunció la noche de este martes que, a tenor de la fuga de más de 300 reclusas de la cárcel de Iquique tras el terremoto, se decidió de manera preventiva que unos 300 militares, en coordinación con la Policía de carabineros, se hagan cargo de la seguridad en esa ciudad norteña