En la víspera, el presidente peruano, Ollanta Humala, convocó a un Consejo de Estado, luego se reunió con líderes políticos del país para abordar el asunto.
El gobierno chileno rechazó el viernes que promueva labores de espionaje, tras la encarcelación de tres suboficiales de la Marina de Perú por supuestamente haber entregado información reservada a Santiago.
En la víspera, el presidente peruano, Ollanta Humala, convocó a un Consejo de Estado, luego se reunió con líderes políticos del país para abordar el asunto y dijo que, de confirmarse, sería "gravísimo" y afectaría las relaciones bilaterales.
"El gobierno de Chile señala que no promueve ni acepta acciones de espionaje en otros Estados ni en su propio territorio", dijo la Cancillería en un breve comunicado.
Dos de los acusados enfrentan cargos por infidencia y traición a la patria en tiempos de paz, mientras que el tercero es culpado de desobediencia.
El caso fue difundido el miércoles en la noche por un canal de televisión peruano que mostró imágenes del proceso en la base militar del Callao, en Perú.
Los marinos habrían realizado varios viajes a Chile y también a Argentina, Brasil y Bolivia, donde supuestamente se habrían reunido con militares chilenos.
Ambos países superaron hace un año un conflicto limítrofe marítimo en la Corte de La Haya, tras décadas de altibajos en sus relaciones por una guerra a fines del siglo XIX en la que Perú perdió territorio.
"Nuestro país señala la voluntad de establecer una agenda de futuro con Perú, para lo cual tenemos la intención de seguir dando pasos de confianza mutua e integración", afirmó la Cancillería chilena.