En una entrevista que publica en su edición de este viernes la revista Capital, Piñera -quien también descartó volver al mundo de los negocios finalizado su período presidencial- dijo que sus planes futuros se relacionan con el mundo académico, las fundaciones y los centros de estudio.
Santiago de Chile, EFE. El presidente de Chile, Sebastián Piñera, aseguró haber descartado una nueva candidatura a La Moneda (sede de Gobierno) y volver a los negocios una vez que termine su mandato, el 11 de marzo de 2014.
En una entrevista que publica en su edición de este viernes la revista Capital, Piñera dijo que sus planes futuros se relacionan con el mundo académico, las fundaciones y los centros de estudio.
Volver a ser presidente "no está en mis planes. No he pensando ni siquiera lo que voy a hacer el 12 de marzo del 2014", dijo el mandatario, aunque matizó que "en las familias el hombre propone y la mujer dispone, y en la vida el hombre propone y Dios dispone".
Un nuevo mandato, "no está en mis planes", insistió y subrayó que tampoco piensa en volver a los negocios, porque "esto (la política) es mucho más apasionante".
Según la última lista de la revista Forbes, Piñera, que se apartó de la administración de sus negocios al llegar a la presidencia, tiene una fortuna de unos US$2.500 millones, administrada mediante un fideicomiso.
Piñera, constitucionalmente, no puede ser candidato en las elecciones del próximo noviembre y sólo podría serlo nuevamente en 2017.
Para el futuro, "tengo mil proyectos que me gustaría realizar. Por ejemplo, potenciar algunas cosas que inicié antes de ser presidente, como la Fundación Futuro, Tantauco (Centro de Estudios) y la Fundación Mujer Emprende", precisó.
"Además, siento que nuestra generación no ha hecho algo grande en materia de igualdad de oportunidades (...). En esa materia, me gustaría contribuir a un país más justo, solidario, con igualdad de oportunidades", afirmó.
Sebastián Piñera, primer derechista que llegó a la presidencia de Chile en una elección desde 1958, aseguró también no sentirse abatido por la baja popularidad que lo ha acompañado durante su mandato, inferior al 40% según las encuestas, lo que contrasta, según sus partidarios, con las grandes realizaciones de su gobierno.
"Uno siempre quisiera mayor respaldo y apoyo de la opinión pública, al igual que uno siempre quiere más cariño y atención de sus seres queridos. Pero siento que la opinión pública está reconociendo lo que este Gobierno ha hecho", dijo Piñera.
Próximo a su tercer aniversario, el gobierno de Piñera destaca como sus grandes obras la reconstrucción de los daños causados por el terremoto de 2010, que cifra en un 87%, y diversas leyes sociales, como un posnatal de seis meses y una reforma educativa.
Ello, en el marco de una economía que ha crecido a un ritmo del 6,0% durante su gestión, con una inflación controlada (1,5% en 2012) y un bajo desempleo (6,0% en el trimestre noviembre 2012-enero 2013).
"Los primeros años fueron de siembra, ahora estamos en tiempos de cosecha porque podemos mostrar lo que las políticas públicas están significando para mejorar la calidad de vida de cada familia chilena", dijo al respecto.
"Por eso, al menos nuestras encuestas muestran que el apoyo del Gobierno está creciendo y con mucha fuerza", añadió y manifestó que el último año de su Gobierno lo enfrentará "con mucha fuerza, entusiasmo y ganas".
"Nunca me he sentido abatido, debilitado, deprimido. Quizás hay algo en mi ADN o que heredé de mis padres, y algo que tiene que ver con estar sentado en este escritorio, que te da una fuerza y una visión muy necesaria para ser presidente", sostuvo.
Tras advertir que sus planes no se agotan en un gobierno, Piñera consideró necesario superar "el pesimismo" que se percibe en la derecha para ganar las elecciones del próximo noviembre, pese a que seguramente la ex presidenta Michelle Bachelet, favorita de todas las encuestas, será la candidata de la oposición.
Definió como "excelentes" a los precandidatos de la derecha, Andrés Allamand y Laurence Golborne, y consideró que "tenemos una buena oportunidad de ganar las próximas elecciones, pero una de las cosas contra las que tenemos que luchar es esa especie de pesimismo endémico que afecta a nuestro sector".