Durante las sesiones, el secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Emilio Álvarez, llamó al Estado mexicano a atender el problema con carácter prioritario.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) externó preocupación por la existencia de fosas comunes o cementerios clandestinos en territorio nacional, así como por el panorama de desapariciones en el país.
Durante una de las cinco audiencias temáticas celebradas este viernes en la CIDH, en Washington DC, Gabino Gómez, del Centro de Derechos Humanos de Chihuahua, aseveró que México es un cementerio humano.
A propósito, el comisionado Paulo Vannuchi expresó preocupación por el dolor de las víctimas e hizo un llamado a hacer acciones comunes para que el año próximo “no se entienda más nada parecido con eso”.
El secretario ejecutivo de la CIDH, Emilio Álvarez, indicó que la existencia de fosas comunes en el país es un asunto de alarma e indignación, por lo que el Estado debería atender este problema con carácter prioritario.
A propósito, el representante permanente de México ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Emilio Rabasa, afirmó que las autoridades han dado muestras de voluntad política para buscar a los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos.
En audiencia, Rosalinda Salinas Durán, directora general de Derechos Humanos de la PGR, aseveró que el caso Iguala detonó el mayor esfuerzo en la historia nacional de búsqueda de personas desaparecidas.
A su vez, sostuvo que la desaparición forzada no es generalizada en todo el país.
En este espacio estuvieron presentes Diana Iris García, Leticia Hidalgo y Lilia Fragoso, familiares de personas desaparecidas, a ellas el representante permanente de México ante la OEA solicitó que aceptaran el respeto que el Estado mexicano guarda hacia las tres y la situación que viven.
En respuesta, Diana Iris García, cuyo hijo desapareció el 21 de febrero del 2007 en Coahuila, le respondió: “Le quiero decir, que sin verdad no hay justicia, que sin justicia no hay memoria. Es muy fácil decir lo de respeto, cuando no se ha vivido ocho, siete, seis, cinco años de no saber del hijo, del ser querido que está desaparecido. No es fácil ponerse en nuestros zapatos y entonces cuando tengan noticias de su paradero, de saber la verdad de lo que pasó, entonces aceptaremos el respeto”.
En la CIDH también se revisaron ese día las garantías básicas en el estado de Guerrero; la reforma energética y sus posibles implicaciones a los derechos humanos; la tortura sexual y el acceso a la justicia de personas migrantes.
Meade justifica “exigencias” de México con relatores de la ONU. El Secretario de Relaciones Exteriores, José Antonio Meade Kuribreña, aseveró que en la medida que el Estado mexicano sea exigente con los relatores de las Naciones Unidas, su trabajo tendrá mayor aceptación e impacto.
Entrevistado este sábado en la inauguración de la Feria de la ONU en su 70 aniversario, que tuvo lugar el 21 y 22 de marzo sobre Paseo de la Reforma, sostuvo que: “En la medida en que las relatorías sean exigentes con México, y México exigente con los relatores, el trabajo tendrá mayor aceptación, tendrá mayor impacto, y no solamente en México sino fuera”.
Enfatizó que “la membresía a muchas de estas instancias dista mucho de ser universal. A México le interesa que así como el país se beneficia de ese diálogo lo hagan también otros países, y será más fácil que eso suceda si el trabajo que están haciendo en México puede ser utilizado de ejemplo. Y de ahí la importancia y la exigencia que México hace de que ese trabajo sea así, de que ese trabajo sea responsable”.
Durante el acto protocolario, cerca de una decena de manifestantes se presentaron en el sitio para dirigir tanto al canciller como a la representante de la ONU en México, Marcia de Castro, consignas sobre la presentación con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos en Iguala.