El presidente Uribe comunicó que las FF.AA. colombianas liberaron al general Luis Mendieta y al coronel Enrique Murillo en una operación efectuada en el selvático departamento del Guaviare.
Bogotá. Las Fuerzas Armadas de Colombia rescataron este domingo "sano y salvo" al general Luis Mendieta, el oficial de más alto rango secuestrado por las FARC, informó el presidente Álvaro Uribe, quien asestó un nuevo golpe militar y político a la guerrilla a una semana de la elección presidencial.
En la misma operación, realizada en el selvático departamento del Guaviare, al sur del país, fue rescatado el coronel Enrique Murillo, quien también hacia parte de un grupo de 22 efectivos de las Fuerzas Armadas que la guerrilla mantiene secuestrados y que busca intercambiar con el Gobierno por cientos de guerrilleros presos.
Mendieta y Murillo llevaban casi 12 años secuestrados por las izquierdistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
"El Comando de Operaciones Conjuntas de nuestras Fuerzas Armadas acaba de rescatar al señor general Mendieta y al señor general Murillo", dijo Uribe en medio de una ovación de los asistentes a un Consejo de Gobierno en la ciudad de Quibdó, la capital del departamento del Chocó.
"Se está combatiendo, es una operación muy difícil que llevamos desde hace meses, nos habían matado un sargento, ya están el general Mendieta y el coronel Murillo a salvo, en poder de nuestras Fuerzas Armadas y seguimos combatiendo allá para tratar de rescatar a los otros", precisó.
La operación, que se constituye en un golpe militar y político para las FARC por parte del Gobierno de Uribe, es la más exitosa desde la realizada en julio de 2008, cuando el Ejército rescató a la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt, tres estadounidenses y 11 efectivos de las Fuerzas Armadas secuestrados por la guerrilla.
El rescate de Mendieta se produjo el mismo día de su cumpleaños, informaron sus familiares que en la madrugada le enviaron mensajes de felicitación a través de la radio.
Felicidad de las familias. Los familiares de los dos rehenes rescatados celebraron el regreso a la libertad de sus seres queridos y el final de una pesadilla marcada por el secuestro.
"No lo puedo creer, soy la mujer más feliz del mundo, me muero por abrazarlo después de tantos años de ausencia", dijo en medio de llanto María Teresa de Mendieta, esposa del general rescatado.
Mendieta y Murillo fueron secuestrados por las FARC en noviembre de 1998, durante un asalto de ese grupo guerrillero a la ciudad de Mitú, la capital del selvático departamento del Vaupés.
Ese demoledor ataque de la guerrilla que utilizó fusiles, ametralladoras y misiles de fabricación casera -cilindros de gas repletos de explosivos- dejó 51 muertos entre policías, militares y civiles.
Mendieta era teniente coronel en el momento de su secuestro y el Gobierno lo ascendió a los respectivos grados superiores con base en una ley aprobada por el Congreso.
El rescate de los dos oficiales se produjo a una semana de la elección presidencial en la que se elegirá al sucesor de Uribe entre el candidato oficialista del Partido de la U, Juan Manuel Santos, y el líder del Partido Verde, Antanas Mockus.
Santos, quien fue ministro de Defensa de Uribe y estuvo al frente del rescate de Betancourt, es favorito para ganar la segunda vuelta de la elección presidencial, de acuerdo con las encuestas sobre intención de voto.
Uribe, quien asumió el poder en 2002, mantiene una ofensiva militar contra la guerrilla a la que obligó a replegarse a apartadas zonas montañosas y selváticas.
La ofensiva, apoyada por Estados Unidos, permitió reducir los asesinatos, las masacres, los secuestros, los asaltos a pueblos y los ataques contra la infraestructura económica del país, al tiempo que facilitó el aumento de la inversión extranjera y un buen desempeño de la economía.
Santos, considerado el heredero político de Uribe, ha prometido mantener la política de seguridad del actual mandatario, pero haciendo más énfasis en lo social para combatir el desempleo y la pobreza.
Los dos oficiales rescatados fueron trasladados a una base militar en la zona y luego serán evacuados en un avión a Bogotá para reunirse con sus familias, informaron las autoridades.