"Tenemos que entender que no estamos en un proceso de sometimiento sino de negociación, y hay que darles alternativas para participar en política (...) Se le está haciendo un gran daño al país diciendo que el proceso promueve la impunidad", señaló el fiscal general de Colombia, Eduardo Montealegre.
Bogotá, Xinhua. El fiscal general de Colombia, Eduardo Montealegre, aseguró este martes que una vez que las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) firmen la paz con el gobierno podrán participar en política y tendrán "garantías" para que participen en esa actividad.
"Tenemos que entender que no estamos en un proceso de sometimiento sino de negociación, y hay que darles alternativas para participar en política (...) Se le está haciendo un gran daño al país diciendo que el proceso promueve la impunidad", señaló Montealegre en el marco de la Marcha por la Paz que se realiza en varias ciudades del país.
El funcionario dijo que estaba de acuerdo en que miembros de las FARC "puedan llegar al Congreso", y de esa forma hacer proselitismo en vez de estar dentro del grupo alzado en armas.
De acuerdo con el fiscal general, los miembros de la cúpula de las FARC podrán postularse para el Congreso, pues "en este momento no existe ninguna condena contra un miembro del secretariado (comandancia) por delitos de lesa humanidad".
El gobierno y el Ejército han acusado a las FARC de rebelión, homicidio gravado y violación al derecho internacional humanitario.
"Hay que pedirles que dejen las armas, pero hay que darles alternativas, y la alternativa es la participación en política; en vez de acudir a los medios violentos para llegar al poder, que acudan a las vías democráticas", recalcó el jefe del ente acusador.
El fiscal general de la nación reiteró su respaldo al proceso de paz que lidera el gobierno del presidente Juan Manuel Santos con las FARC, y reveló que fueron suspendidas "50 órdenes de captura que hay en contra de seis nuevos negociadores de la guerrilla", quienes salieron recientemente del país con rumbo a Cuba.
A instancias de los gobiernos de Cuba y Noruega, el gobierno de Santos negocia con las FARC un acuerdo de paz, que busca poner fin a un conflicto armado interno de casi 50 años.
Las conversaciones se iniciaron en octubre pasado y se realizan actualmente en La Habana, Cuba, mientras que en Colombia el gobierno se ha negado a decretar un cese al fuego y el Ejército desarrolla una intensa campaña militar contra los guerrilleros.