"La nueva ley prevé que este tipo de maternidad se realizará sin fines de lucro para los padres biológicos y la mujer gestante, protegiendo en todo momento la dignidad de la persona y el interés superior del menor nacido", dijo la presidenta de la comisión de Salud de la Asamblea Legislativa, Maricela Contreras.
México DF. El Congreso de la Ciudad de México aprobó el martes una ley que permite a parejas con problemas de infertilidad usar el útero prestado de una mujer para la gestación de su hijo, una reforma progresista que se suma a otras más en la populosa urbe.
La Ley de Gestación Subrogada, aprobada por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal -dominada por partidos de izquierda-, contempla la firma de un contrato entre la pareja y la mujer gestante en el se prohíbe algún pago de por medio.
La norma "define a la maternidad subrogada como la práctica médica consistente en la transferencia de embriones humanos en una mujer, producto de la unión de un óvulo y un espermatozoide fecundados por una pareja", dijo la presidenta de la comisión de Salud de la Asamblea Legislativa, Maricela Contreras.
"La nueva ley prevé que este tipo de maternidad se realizará sin fines de lucro para los padres biológicos y la mujer gestante, protegiendo en todo momento la dignidad de la persona y el interés superior del menor nacido", agregó.
Según legisladores, en México 1.5 millones de parejas enfrentan la imposibilidad física o contraindicación médica para llevar a cabo la gestación de un hijo.
La aprobación de esta ley forma parte de una serie de reformas impulsadas por el Gobierno de la Ciudad de México, de unos 20 millones de habitantes en su área metropolitana, que han incluido el aborto antes de las 12 semanas de gestación y los matrimonios entre homosexuales.
Estas reformas, que también abarcan la posibilidad de que las parejas homosexuales que se casen puedan adoptar niños, han despertado la ira de la Iglesia católica, algunas de cuyas autoridades han mantenido abiertos enfrentamientos con el alcalde izquierdista de la ciudad, Marcelo Ebrard.