La reforma extenderá la cobertura de salud a 32 millones de estadounidenses, ampliará el plan de salud de gobierno para los pobres, impondrá nuevos impuestos a quienes tienen mayores ingresos y prohibirá prácticas como el rechazar cobertura a personas con condiciones médicas preexistentes.
Washington. El presidente estadounidense, Barack Obama,aseguró una importante victoria cuando la Cámara de Representantes diola aprobación final a una amplia reforma de salud que expande lacobertura a casi todos los ciudadanos, una de las iniciativas claves deGobierno.
Las acciones de las aseguradoras de salud abrieron al alza las operaciones del lunes, mientras el resto del mercado caía.
Enuna reñida votación por 219-212 el domingo a última hora, losdemócratas de la Cámara de Representantes aprobaron el más profundocambio a las políticas de salud en décadas. La votación envía elproyecto de reforma, ya aprobado por el Senado, a Obama para que lofirme y lo convierta en ley.
El índice Morgan StanleyHealthcare Payor de aseguradoras de salud subía un 0,9 por ciento, Elíndice S&P Health Care Sector subía un 0,4 por ciento.
Lasgrandes aseguradoras WellPoint Inc y UnitedHealth Group tuvieron unapequeña alza, mientras las aseguradoras como Amerigroup y MolinaHealthcare, que se enfocan en planes de Medicaid para estadounidensesde bajos ingresos, escalaban fuertemente.
La industria deseguros de salud se opuso fuertemente a la reforma. Las accionesrelacionadas al sector se recuperaron a fines de la semana pasadamientras los inversionistas comenzaron a notar que sus peores temoresno se habían materializado.
La reforma extenderá la coberturade salud a 32 millones de estadounidenses, ampliará el plan de salud de gobierno para los pobres, impondrá nuevos impuestos a quienes tienenmayores ingresos y prohibirá prácticas como el rechazar cobertura apersonas con condiciones médicas preexistentes.
Su aprobaciónpone fin a una batalla política con los republicanos que consumió alCongreso estadounidense y redujo las cifras de aprobación de Obama, ycumple un objetivo que los demócratas no habían logrado alcanzar desdeel intento fallido de reforma del presidente Bill Clinton en 1994.
"Esun gran paso para muchos estadounidenses de clase media que justo ahoraenfrentan la bancarrota debido a cuentas de salud impagas o estánaterrados de que sus hijos tengan un accidente o no pueden ir aldoctor", dijo el lunes la secretaria de Salud de Obama, KathleenSebelius, en una entrevista con MSNBC.
Obama agradeció en la Casa Blanca haber logrado el ambicioso objetivo de reformular el sistema de cobertura sanitaria.
"Estanoche, en un momento en que los expertos dijeron que ya no era posible,nos elevamos sobre el peso de nuestra política", dijo Obama durante undiscurso en la Casa Blanca.
"Esta legislación no solucionarátodos los problemas que aquejan a nuestro sistema de salud, pero noshará avanzar en la dirección correcta.(..) así es como luce el cambio",declaró el mandatario demócrata.
Los demócratas de la Cámarase abrazaron y celebraron cuando la reforma alcanzó los 216 votosnecesarios, cantando: "Sí, podemos". Todos los republicanos seopusieron al proyecto, y 34 demócratas se les sumaron votando en contra.
Republicanosy críticos en la industria sostenían que la iniciativa -que costará940.000 millones de dólares en 10 años- sería una fuerte intervenciónen el sector de salud que elevaría los costos, incrementaría el déficitde presupuesto y reduciría las opciones de los pacientes.
Ambospartidos se alistaban para otra batalla por la reforma de salud en lacampaña antes de las elecciones legislativas de noviembre, y susoponentes en el país prometieron impugnar la legislación a nivelestatal.
Grandes cambios. La reforma al sistema desalud, la mayor prioridad doméstica de Obama, daría paso a los mayorescambios en el sistema de salud estadounidense de 2,5 billones dedólares desde la creación en 1965 del programa Medicare, administradopor el gobierno, para ancianos y discapacitados.
Lalegislación requerirá que todos los estadounidenses posean un seguro desalud, pero entrega subsidios para ayudar a trabajadores de bajosingresos a pagar el suyo, y crea bolsas donde individuos y grupospuedan revisar y comparar planes de seguros.
Importantesprovisiones como los intercambios y subsidios no entrarán en vigenciahasta el 2014, pero muchas de las reformas como prohibir que lascompañías nieguen cobertura a los enfermos comenzarán en efecto elprimer año.
La Cámara baja también aprobó un paquete decambios al proyecto del Senado que deseaban los demócratas. El Senadorecibirá ese paquete esta semana y lo revisará bajo las normas dereconciliación de presupuesto, lo que requiere de una mayoría simplepara su aprobación.
Los cambios incluyen la eliminación de uncontrovertido acuerdo del Senado que excluía al estado de Nebraska delpago de los costos de la ampliación del programa Medicaid, el cierre deun vacío en la cobertura de medicamentos vendidos bajo receta ymodificaciones a los impuestos a los planes de seguro de alto costo.
Losrepublicanos dijeron que se opondrían a esos cambios en el Senadomediante puntos de orden parlamentarios y creen que podrían bloquear suaprobación.
"Los republicanos del Senado ahora haremos todoen nuestro poder para reemplazar las enormes alzas de impuestos, losrecortes a Medicare con los mandatos con las reformas en nuestrosdistritos han estado pidiendo durante el debate", dijo el líderrepublicano del Senado, Mitch McConnell.
La votación sobre lareforma se hizo tras días de fuertes negociaciones entre demócratas dela Cámara indecisos, Obama y líderes de la Cámara. La estrecha victoriafue asegurada en horas anteriores del domingo con un acuerdo diseñadopara sumar a los pocos demócratas que se oponen a los derechosabortivos.
Bajo el acuerdo, Obama emitirá una orden ejecutivaconfirmando que las restricciones del Gobierno al uso de fondosfederales para el aborto no serán cambiadas por la iniciativa dereforma de salud.
El compromiso recibió el apoyo delrepresentante Bart Stupak y un puñado de legisladores demócratas que seoponen al aborto, que amenazaron con votar contra la iniciativaaprobada por el Senado porque decían que sus restriccionesantiabortistas no eran lo suficientemente estrictas.
Empresasfarmacéuticas, hospitales y otras compañías se beneficiarán de máspacientes asegurados, y el proyecto de ley no permite al Gobiernolimitar los precios y las primas, lo que dañaría a las farmacéuticas yaseguradoras.
Sondeos de opinión muestran que el públicotambién tiene posturas diversas. Si bien muchos se oponen a la ley y elproceso a molestado a muchos estadounidenses, algunos de loscomponentes de la reforma tienen un fuerte respaldo.
Laaprobación final del proyecto representa un sorprendente cambio desdeenero, cuando se consideró que estaba muerto luego de que losdemócratas perdieron su crucial voto 60 en el Senado en una elecciónespecial en Massachusetts.
Pero Obama y los demócratas seunieron el mes pasado en un último esfuerzo, y usarán las normas dereconciliación de presupuesto del Senado para evitar el tener quereunir 60 votos para aprobar los cambios que buscan.