Abdo recibió la banda presidencial de manos del titular del Congreso, Silvio Ovelar, en una ceremonia en la sede del Gobierno a la que no asistieron legisladores de su partido leales al saliente presidente Horacio Cartes.
Asunción.- El exsenador Mario Abdo Benítez asumió este miércoles la presidencia de Paraguay con el desafío de mantener la estabilidad económica, combatir la pobreza y luchar contra la corrupción en medio de un creciente descontento ciudadano.
Abdo recibió la banda presidencial de manos del titular del Congreso, Silvio Ovelar, en una ceremonia en la sede del Gobierno a la que no asistieron legisladores de su partido leales al saliente presidente Horacio Cartes.
“Sí juro”, respondió el nuevo mandatario, de 46 años, en el acto en el que participaron seis presidentes de Latinoamérica y la mandataria de Taiwán, que tiene a Paraguay como aliado.
La presidencia de Abdo, un especialista en marketing formado en Estados Unidos, mantendrá en el poder durante los próximos cinco años al conservador Partido Colorado, que dominó la política paraguaya las últimas siete décadas, incluida la feroz dictadura del general Alfredo Stroessner.
Al reemplazar en el cargo al millonario tabacalero Cartes, el nuevo presidente recibirá un país estable en términos económicos pero con manifestaciones ciudadanas en aumento por casos de corrupción que involucran mayormente a legisladores del oficialismo.