El mandatario pronosticó que si el oficialismo no logra resultados favorables en la elección del 23 de febrero -que contempla elección de alcaldes, prefectos y autoridades locales-, habrá un periodo “muy serio” de ingobernabilidad en Ecuador.
El presidente de la República Rafael Correa no tomó licencia este lunes como estaba previsto para dedicarse a la campaña electoral.
La Asamblea había otorgado la licencia solicitada por la presidencia de la República desde hoy hasta el próximo 20 de febrero, fecha autorizada por el Consejo Nacional Electoral (CNE) para promocionar las candidaturas seccionales, tres días antes de las elecciones del 23 de febrero para nombrar a alcaldes, prefectos, concejales y miembros de las juntas parroquiales.
Durante una entrevista con Radio América, este lunes el mandatario dijo: "Quiero anunciarle al pueblo de Quito y Ecuador que he retirado la licencia para este día y estaré trabajando, despachando desde Carondelet asuntos de gobierno".
Pero en la misma entrevista, el jefe de Estado promocionó la candidatura de Augusto Barrera para la reelección en la alcaldía de Quito y arremetió contra el inmediato contendor, el candidato Mauricio Rodas.
Y pronosticó que si el oficialismo no logra resultados favorables el próximo 23 de febrero, habrá un periodo “muy serio” de ingobernabilidad en el país. “Empezaría un periodo muy serio de ingobernabilidad, no sé si desestabilización, porque tenemos un gran apoyo popular, pero eso puede cambiar de la noche a la mañana con una buena mentira de los medios”.
"Lo que se juega el domingo no es solo la alcaldía de Quito que es extremadamente importante y Augusto Barrera lo ha hecho muy bien; si es un poco el rechazo a la personalidad de Augusto, pero no estamos eligiendo a mister simpatía el domingo, sino alcalde de la capital más bella de América Latina. Ya de por sí, la alcaldía es sumamente importante, pero también está en juego el proyecto político, la revolución ciudadana, también está en juego porque esa es la táctica usada en Venezuela, en Argentina, en Bolivia, enquistarse en gobiernos locales para desestabilizar al gobierno nacional".
Y pidió a los quiteños no votar con "iracundia", es decir con ira.