Los enfrentamientos en la capital se producían mientras el enviado de Naciones Unidas Kofi Annan comenzaba una visita de dos días a Moscú donde se reunirá con el presidente ruso, Vladimir Putin.
Beirut. La capital siria era escenario este lunes de enfrentamientos entre los rebeldes y fuerzas del gobierno por segundo día consecutivo, dijeron activistas, en algunos de los choques más intentos en Damasco desde el estallido de la revuelta hace 17 meses contra el presidente Bashar al-Assad.
Vehículos blindados se desplegaban en el distrito sur de Midan y había francotiradores en los techos, dijeron residentes. En videos subidos por activistas con presencia en el área se podía escuchar el sonido de ametralladoras.
"Las fuerzas de seguridad entraron en el vecindario, hay una verdadera guerra ahora mismo", dijo un residente de Midan.
Los enfrentamientos en la capital se producían mientras el enviado de Naciones Unidas Kofi Annan comenzaba una visita de dos días a Moscú donde se reunirá con el presidente ruso, Vladimir Putin.
El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, dijo el lunes que no había cambiado la postura del país sobre el conflicto en Siria.
Lavrov reiteró la oposición de Moscú a la resolución abordada por el Consejo de Seguridad de la ONU sobre la extensión de la misión de supervisión en Siria, que incluye una amenaza de sanciones.
Añadió en rueda de prensa que esas amenazas contenían "elementos de chantaje".
"Si nuestros socios deciden bloquear nuestra resolución independientemente de lo que ocurra, entonces la misión de la ONU no tendrá un mandato y tendrá que dejar Siria. Eso sería una lástima", dijo.
La misión de supervisión fue suspendida debido a la creciente violencia en el país, donde los activistas denuncian la muerte de más de 17.000 personas.
Al menos cinco personas murieron y decenas resultaron heridas en los enfrentamientos del domingo. Los activistas decían que habría más bajas en los choques de lunes pero que aún no podían dar estimaciones.
Un activista, que pidió no ser identificado, dijo que los residentes se estaban preparando para más problemas en la capital después de que el ejército aplastó focos de revueltas en suburbios en las afueras de Damasco.
"Hubo miles de combatientes en algunos de estos suburbios. Algunos de ellos murieron, pero muchos huyeron y se han marchado a la capital", dijo el activista.
Un grupo de manifestantes bloqueó la autopista que conduce a Jordania en solidaridad con los residentes de los barrios de Midan y Zahera, donde se registraban enfrentamientos.
"El humo está subiendo en esta zona. La gente está bloqueando esta carretera con piedras y neumáticos quemados", dijo el activista Samir al-Shami, hablando vía Skype.
Los testimonios en Siria son difíciles de verificar porque el Gobierno ha restringido el acceso a la prensa internacional.
Embajadores expulsados. La presión sobre Assad crece tanto desde fuera de su Gobierno como desde adentro.
Marruecos ordenó que su embajador en Siria deje al país y lo declaró persona no grata, ante lo cual Damasco respondió con la misma medida sobre el representante de Rabat en el país.
Estas medidas de producen días después de que el embajador de Siria en Irak desertó y se pasó a las filas de la oposición y luego de que un importante aliado de Assad huyera de Siria.
La creciente violencia en Siria, que incluyen varias presuntas masacres, ha incrementado el repudio dentro del país. Lo que comenzó como una serie de protestas pacíficas ha derivado en una insurgencia armada que repele fuertemente la represión de las fuerzas de Assad.
El Comité Internacional de la Cruz Roja clasifica ahora al conflicto en Siria como una guerra civil.
Annan visita Moscú apenas días después de que la oposición siria reportó una nueva masacre en la aldea de Tremseh, que generó una ola de denuncias por parte de Occidente.
Moscú, junto con China, ha bloqueado la imposición de sanciones más duras contra Siria en el Consejo de Seguridad.