¿"Por qué aprovecharse de un gobierno que no apela a la represión brutal, como vemos en otros países contra jóvenes que son miles, y cuando hay miles es porque hay algún problema"? preguntó la presidenta argentina frente a las protestas protagonizadas por manifestantes de una organización del sector agrícola.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner afirmó que "nunca vamos a criminalizar la protesta social", pero exhortó a quienes manifiesten que lo hagan de manera de no obstaculizar el desplazamiento y las actividades de otras personas.
"Los argentinos merecemos otro tipo de prácticas para formular las protestas", dijo y agregó: "Les pido a quienes quieran protestar que no se priven de hacerlo, pero que lo hagan sobre la vereda o en Plaza de Mayo".
La presidenta, tras dejar inaugurada la instalación de un tomógrafo en el hospital policial Churruca mediante videoconferencia, se refirió al corte de la autopista Ricchieri realizado esta mañana por unos cincuenta manifestantes pertenecientes a la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE).
Esto obligó al desplazamiento de cien efectivos de Gendarmería para despejar la autopista.
¿"Por qué aprovecharse de un gobierno que no apela a la represión brutal, como vemos en otros países contra jóvenes que son miles, y cuando hay miles es porque hay algún problema"? preguntó la presidenta.
En ese sentido, remarcó que "es un crimen distraer cien efectivos para esto, que fue casi mamarrachesco".
"Tenemos que tener paciencia, nunca vamos a criminalizar la protesta social, pero eso fue apenas un cocoliche", dijo.
Señaló que "tuvimos que desplazar cien efectivos para despejar la autopista sin violencia, como lo ha hecho siempre este gobierno".
Mencionó que los manifestantes, apenas llegaron los efectivos, "enrollaron sus pancartas, se subieron a los autos y se fueron a comer a una parrilla. Nunca vi nada igual".
En tanto, al referirse al hospital Churruca, la presidenta afirmó "en esta primera etapa se invirtieron casi 15 millones de pesos en la obra" y, este aparato computado, era "muy demandado por los 180 mil agentes federales y sus familiares".
"El aparato detecta con precisión la ubicación de la bala. El Ministerio de Salud aportó una cifra superior a los 8 millones de pesos en ambulancias y otras necesidades del hospital", dijo la presidenta, quien agregó que "ese aporte también estará destinado a la seguridad dentro del establecimiento".
La presidenta habló en Casa de Gobierno acompañada por el ministro de Economía y vicepresidente electo, Amado Boudou; la ministra de Seguridad, Nilda Garré; el ministro de Planificación, Julio de Vido; el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández y desde el hospital Churruca, por el ministro de Salud, Juan Manzur, entre otras autoridades.