Las autoridades de la UE esperan que la membresía croata persuada a otros países de los Balcanes de que los sacrificios valen la pena, y acelere la transición en una región desgarrada por las guerras de la década de 1990.
Bruselas. Croacia firmó este viernes un tratado de acceso para convertirse en miembro de la Unión Europea en julio del 2013, mientras que su vecina Serbia vio cómo los líderes europeos aplazaban la decisión de concederle el estatus de candidata a la membresía.
Las autoridades de la UE esperan que la membresía croata, una recompensa por profundas reformas democráticas y económicas aplicadas en Zagreb, persuada a otros países de los Balcanes de que los sacrificios valen la pena, y acelere la transición en una región desgarrada por las guerras de la década de 1990.
Muchos Estados de la región siguen luchando por dejar atrás el legado del conflicto étnico, y Serbia no ha logrado convencer a los gobiernos europeos de su buena voluntad respecto a Kosovo, una ex provincia que se independizó en 2008, un paso que Belgrado no reconoce.
"El logro de Croacia prueba a todos en la región que a través de trabajo duro, persistencia, coraje político y determinación, la membresía de la UE está al alcance", afirmó el presidente del consejo europeo, Herman van Rompuy, durante la ceremonia de firma de acceso al margen de una cumbre del bloque.
"Croacia es una pionera, demostrando de forma tangible que el futuro de los Balcanes occidentales en su conjunto yace en la Unión Europea. La Unión sigue comprometida con esa perspectiva", indicó.
La cumbre estuvo dominada por los esfuerzos por crear una unión fiscal para poner freno a la crisis de deuda de la eurozona. Al final, la mayoría de los miembros, liderados por Alemania y Francia, accedieron a seguir adelante con cambios de tratado, dejando aislado a Reino Unido.
Según los términos de su entrada en la UE, Croacia debe esforzarse por unirse al euro. El primer ministro electo de Croacia, Zoran Milanovic, dijo en Zagreb que se trata de un requisito "a mediano plazo".
"Ese es nuestro objetivo", añadió. Analistas creen que Croacia podría apuntar a unirse al euro a finales de esta década.
El país de la costa adriática de 4,3 millones de habitantes - menos del 1% de la población actual de la UE- inició hace seis años sus negociaciones de acceso.
Su solicitud encontró problemas debido a las preocupaciones por la corrupción y el lento progreso de Zagreb en asumir el legado de las guerras de los Balcanes. Pero una reforma de último minuto impulsada por el primer ministro saliente Jadranka Kosor convenció a la Unión de que Croacia estaba lista.
"Ahora debe mantenerse el impulso de esta reforma", afirmó el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Barroso.
Zagreb estará supervisada por la UE antes de su acceso y se espera que la ejecutiva europea informe sobre sus progresos en sus reformas contra la corrupción.