La policía dijo que 2.500 personas se manifestaron fuera del palacio presidencial en la capital, Brasilia, y que otras salieron a la Avenida Paulista en Sao Paulo. Decenas de legisladores opositores interrumpieron la sesión de Congreso, pidiendo la renuncia de Rousseff.
Brasilia/Sao Paulo. La designación del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva como jefe de gabinete provocó el miércoles protestas en Brasil y el audio de una conversación telefónica con la presidenta Dilma Rousseff sustentó los argumentos de la oposición sobre que el nombramiento busca protegerlo de una investigación.
La policía dijo que 2.500 personas se manifestaron fuera del palacio presidencial en la capital, Brasilia, y que otras salieron a la Avenida Paulista en Sao Paulo. Decenas de legisladores opositores interrumpieron la sesión de Congreso, pidiendo la renuncia de Rousseff.
Lula, cuya designación como ministro fue anunciada en una edición especial del diario oficial, ahora sólo puede ser juzgado por el Supremo Tribunal de Justicia. Fiscales estatales y federales lo habían acusado de lavado de dinero y fraude y habían solicitado su arresto.
El juez federal Sergio Moro, quien está a cargo de un creciente caso sobre corrupción, dijo en un documento de la corte divulgado el miércoles que la conversación telefónica muestra que Lula y la presidenta Dilma Rousseff consideraron intentar influir en su investigación.
"Observo que, en algunos diálogos hablan sobre, aparentemente, intentar influir u obtener asistencia de los fiscales o de las cortes en favor del ex presidente", escribió Moro en el documento publicado en el sitio en internet del tribunal.
Moro sostuvo que no hay información de que efectivamente se haya realizado un intento por influir en las autoridades. La grabación, que fue hecha pública por el tribunal, también incluye una parte en la que Rousseff le ofrece a Lula enviarle una copia de su designación, "en caso de que fuese necesaria".
Los críticos calificaron la designación de Lula, un líder carismático que sigue siendo una de las figuras más influyentes de Brasil a pesar de que dejó la presidencia hace seis años, como un intento desesperado por evitar el juicio político a Rousseff y un arresto del ex mandatario.
Rousseff dijo que Lula fue nombrado por su experiencia y señaló que tiene un pasado defendiendo la estabilidad fiscal y combatiendo la inflación. Agregó que su designación no significa que esté por encima de la investigación, ya que aún puede juzgarlo el máximo tribunal del país.