Dos exoficiales de las Fuerzas Armadas argentinas fueron condenados a prisión perpetua por el asesinato del obispo Enrique Angelelli, un crimen cometido durante la dictadura militar que afligió a ese país (1976-1983).

Luis Estrella y Luciano Menéndez, dos oficiales retirados de las Fuerzas Armadas de Argentina, fueron condenados a prisión perpetua como autores mediatos del asesinato del obispo Enrique Angelelli, un crimen cometido a principios de la dictadura militar que afligió a ese país sudamericano entre 1976 y 1983. El Tribunal Oral Federal de La Rioja, provincia del noroeste argentino, los señaló como autores del homicidio, revocó sus sentencias de “casa por cárcel” y ordenó que se les recluyera en una penitenciaria común.

Angelelli murió el 4 de agosto de 1976 cuando un vehículo hizo volcar la camioneta donde él viajaba. La Junta Militar argentina siempre describió el suceso como un accidente automovilístico; pero el padre Arturo Pinto, quien acompañaba a Angelelli en aquel viaje y sobrevivió al atentado, introdujo una demanda para que el caso fuera investigado exhaustivamente. Los jueces Quiroga Uriburu, Carlos Julio Lascano y Juan Carlos Reynaga determinaron que Estrella y Menéndez orquestaron el ataque.

Estrella y Menéndez fueron “responsables de una acción premeditada, provocada y ejecutada en el marco del terrorismo de Estado en contra” de Angelelli y Pinto, según el fallo de la corte argentina. Menéndez era jefe del III Cuerpo de Ejército y el comodoro Estrella conducía en La Rioja la represión terrorista en representación de la Fuerza Aérea, detalló la agencia estatal de noticias Télam. Otros acusados en relación con este caso –entre ellos Jorge Rafael Videla, Juan Carlos Romero y Albano Harguindeguy– murieron antes de iniciarse el juicio.