“Fundamentalmente fue una explicación de la naturaleza del rescate, el carácter no letal del material que llevaban los militares", informó el ministro de Defensa, Javier Ponce, sobre su reunión con el subsecretario para Asuntos Políticos de la ONU, Óscar Fernández.
El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas explicó este miércoles al subsecretario para Asuntos Políticos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Óscar Fernández, las consideraciones por las cuales el mando militar ordenó la Operación Rescate, el 30 de septiembre del 2010, en el Hospital de la Policía en Quito durante la revuelta policial.
Por invitación del gobierno el delegado de la ONU se encuentra en el país sudamericano para investigar los hechos ocurridos el 30-S, cuando policías y militares se enfrentaron a bala durante el rescate al presidente Rafael Correa, que hiciera personal de élite del Ejército en la casa de salud.
Según el ministro de Defensa, Javier Ponce, el Comando Conjunto entregó al delegado del secretario de la ONU, Ban Ki-moon, toda la información del operativo militar y los documentos que fueron desclasificados por el Consejo de Seguridad Pública y del Estado (Cosepe) sobre la planificación de la Operación Rescate.
“Fundamentalmente fue una explicación de la naturaleza del rescate, el carácter no letal del material que llevaban los militares. Basta con ver cuántos son los heridos militares y cuántos los de la Policía. Y el hecho de que el hospital había perdido su condición de tal en la medida que se había convertido en una trinchera de los sublevados”, manifestó Ponce.
Y añadió: “Fue una exposición que hizo el Comando Conjunto, en donde expuso las condiciones que se vivían en ese momento en la zona de crisis; la presencia de francotiradores, la necesidad urgente de entrar al rescate del presidente”.
Este miércoles Fernández se reunió en Carondelet con Correa a donde acudieron el canciller Ricardo Patiño; la ministra Coordinadora de Patrimonio, María Fernanda Espinosa; el ministro del Interior, José Serrano; y el secretario del presidente, Gustavo Jalkh.
Luego de la reunión, el medio oficial El Ciudadano publicó unas declaraciones atribuidas al delegado de las ONU: “Hemos tenido una reunión muy buena, muy abierta, transparente, (hubo) intercambio de comunicación e información como lo hemos tenido con todos los interlocutores con los cuales nos hemos reunido y hemos podido ir acumulando elementos sobre los acontecimientos que sucedieron el 30 de septiembre, un acontecimiento sumamente grave de desestabilización a la democracia en Ecuador”.
El representante de la ONU concluye este viernes la visita al Ecuador. Ayer se reunió con la Comisión Ecuménica de Derechos Humanos. Visitó la Fiscalía y la Asamblea Nacional.
El asambleísta César Montúfar (CN) solicitó al delegado de la ONU que también escuche a las víctimas del 30-S, como el exdirector del Hospital de la Policía, César Carrión, quien fue acusado por el Gobierno de magnicidio y fue sobreseído.
Apuntes sobre visita de organismo. Este viernes se prevé que la ONU emita un comunicado sobre los resultados de la visita al Ecuador.
El presidente Rafael Correa hizo públicamente, el 14 de octubre del 2011, la invitación a la ONU para que investigue los hechos del 30-S.
La solicitud formal fue entregada por la ministra María Fernanda Espinosa al organismo, el 25 de noviembre del 2011.