Este martes, dos manifestantes y un policía murieron en enfrentamientos y las protestas que surgieron en varias ciudades egipcias, donde la gente molesta por la pobreza y la represión han sido inspirados por la caída este mes del líder de Túnez.
El Cairo. La policía usó gas lacrimógeno y un cañón de agua para dispersar a los manifestantes egipcios en El Cairo en las primeras horas de este miércoles, después de un largo día de protestas sin precedentes pidiendo el fin de los 30 años de gobierno del presidente Hosni Mubarak.
Este martes, dos manifestantes y un policía murieron en enfrentamientos y las protestas que surgieron en varias ciudades egipcias, donde los manifestantes molestos por la pobreza y la represión han sido inspirados por la caída este mes del líder de Túnez.
"Abajo, abajo Hosni Mubarak", cantaban los manifestantes después de huir de la central plaza Tahrir. Algunos lanzaron piedras contra la policía, que los atacó con bastones para evitar que los manifestantes regresaran a la plaza después de que fue despejada mediante el uso de gas lacrimógeno.
"Matones", gritaban los manifestantes mientras corrían. Otros decían: "Ustedes no son hombres". La policía utilizó un cañón de agua contra los manifestantes y avanzó en filas hacia la plaza.
Enfrentamientos esporádicos ocurrieron en la mañana de este miércoles, pero en las horas previas al amanecer los manifestantes parecían haber sido dispersados. La policía recorría la plaza Tahrir, mientras barrenderos limpiaban las rocas y basura.
"Abajo Mubarak" decía una pintura en una pared. Camiones de la policía estaban alineados en una calle secundaria.
Algunos manifestantes habían dicho que intentarían reagruparse durante el miércoles. Las fuerzas de seguridad dijeron que no permitirían que las protestas se reorganicen.
Washington, un aliado cercano y un gran donante, llamó a la calma. La secretaria de Estado Hillary Clinton dijo que el gobierno de Mubarak es estable y que está buscando maneras de satisfacer las necesidades de los egipcios.
"El gobierno egipcio tiene una importante oportunidad de responder a las aspiraciones del pueblo egipcio y busca reformas políticas económicas y sociales que puedan mejorar sus vidas y ayudar a Egipto a prosperar", dijo un comunicado de la Casa Blanca.
Los eventos en la región son un recordatorio de que "todo el mundo desea ciertas cosas", como libertad de expresión, una voz en el gobierno y el imperio de la ley, agregó la Casa Blanca.
Twitter, el servicio de mensajería en internet que ha sido uno de los principales métodos utilizados por los manifestantes para organizarse, dijo que había sido bloqueado en Egipto.
En un mensaje, la compañía escribió: "nosotros creemos que el intercambio abierto de información y posturas beneficia a las sociedades y ayuda a los gobiernos a conectarse mejor con sus pueblos".
Miles de manifestantes habían dicho anteriormente que planeaban permanecer en la plaza Tahrir hasta que el gobierno caiga. Algunos manifestantes y policías compartían comida y conversaban en la tarde del martes, después de un día de protestas que cerró muchas de las calles de El Cairo al tránsito.
Los manifestantes destrozaron imágenes del presidente y su hijo, Gamal, quien según muchos egipcios está siendo preparado para el cargo. Tanto Gamal como su padre niegan tal plan.