Al hacer un balance de la actuación de la institución en la emergencia causada por el terremoto, el comandante en jefe dijo que se rompieron los miedos de la izquierda chilena de ver militares en la calle. “La acogida fue tremendamente positiva”, dijo.
Santiago. Al hacer una evaluación de las tareas asumidas por el ejército chileno en el marco de la emergencia que vivió el país tras el terremoto del pasado 27 de febrero, el comandante en jefe de la institución, Juan Miguel Fuente-Alba, se manifestó satisfecho por la tarea realizada y consideró que con ello se rompió el miedo de la izquierda chilena de ver a militares en las calles.
En entrevista dada al diario La Segunda, el uniformado sostuvo que en las tres regiones del centro sur de Chile en las que se declaró estado de catástrofe, por lo cual se desplegó fuerzas militares, “la acogida de la ciudadanía afectada fue tremendamente positiva. Es muy alentador para las generaciones más jóvenes del Ejército sentir un cariño que va más allá del que se le da a una persona que ayuda, si no que a una institución que actuó como paragua protector, que acogió a todos los que sufrieron problemas”.
Consultado si con ello se rompieron los resquemores de los sectores de izquierda respecto a desplegar uniformados en la calle, respondió que “pienso que sí”, y agregó que “el Ejército es de todos los chilenos: es una verdad histórica, que está en el carácter del chileno”.
A su juicio esta premisa se vio en terreno “y aprobamos. Y en este nuevo desafío que vamos a afrontar, esta nueva fase que parte hoy día, queremos lograr mejor nota aún”.
Superado el estado de catástrofe, el Ejército chileno comenzará el Plan Bicentenario, en el que se considera la ayuda a la reconstrucción del país.
En una primera etapa se destinarán 10 mil efectivos para tareas de reconstrucción en las tres zonas más devastadas de Chile.
En una segunda área de apoyo, se busca fortalecer al Cuerpo Militar del Trabajo con 1.120 personas. Usando esta plataforma, la institución preparó un plan que espera la aprobación del gobierno, que le permitiría administrar 12 mil puestos de emergencia que se destinarían principalmente a tareas de reconstrucción en la región del Bío Bío, poniendo la prioridad en la instalación de viviendas de emergencia.
Debido a las tareas para mitigar los daños del terremoto, el Ejército debió posponer algunas actividades programadas para celebrar el Bicentenario. Una de las más sentidas por el general fue la expedición binacional con Argentina al polo sur.
Fuente- Alba señaló que la concentración de militares en la zona central del país no descuidará la protección de las fronteras, pues para la reconstrucción se utilizarán las divisiones ubicadas en el centro de Chile. Tampoco se tocarán las fuerzas desplegadas en Haití y Bosnia.
En cuanto a la propuesta de que las FF.AA. no reciban todo el 10% de las ventas de Coldelco, para poder destinar esos recursos a reconstrucción, advirtió que “hay que tener en consideración que hay compromisos en flujos futuros –hasta 2013- de uso de los dineros disponibles del cobre y que ha sido autorizado debidamente por decretos. Este dato debe estar sobre la mesa”.
Consultado sobre el hecho de que el precio del cobre está por arribar de los presupuestado, por lo que queda un remanente que podría ser redireccionado, respondió que “pienso que sí. Si hay iniciativas en este sentido, hay que abrirse a que esa opción pudiera existir- Es un asunto que las autoridades y organismo permanentes deberán debatir. Seguramente nos preguntarán nuestra opinión”.