"Nuestros países tienen que poner atención especial a la desigualdad porque esto les puede llevar a conflictos sociales importantes", enfatizó la mexicana Gina Casar.
La secretaria general adjunta y administradora asociada del Programa de la ONU para el Desarrollo, la mexicana Gina Casar, advirtió este lunes del riesgo de "conflictos sociales" que encierran las desigualdades en América Latina.
En una entrevista con EFE, Casar recordó que "América Latina es la región del mundo con más desigualdades", algo de lo que ya deja constancia el último Informe sobre el Desarrollo Humano 2014, que refleja no obstante un fuerte descenso de la pobreza en Latinoamérica, pasando del 48 % en 1990 al 28 % en 2012, y con una creciente clase media.
"Nuestros países tienen que poner atención especial a la desigualdad porque esto les puede llevar a conflictos sociales importantes", dijo Casar este lunes al recordar que la "eficacia" en el desarrollo, según lo deja claro el plan estratégico del PNUD, "tiene que ser inclusiva y centrada en la reducción de la desigualdad", declaró.
A la pregunta sobre por qué América Latina es donde hay más desigualdades, Casar lo atribuyó a que las políticas públicas no llegan a la población y a la corrupción.
Advirtió además sobre la "vulnerabilidad" de la incipiente clase media, expuesta a eventos y crisis económicas y desastres naturales.
En este contexto y sobre este último aspecto, se refirió al creciente fenómeno de desastres naturales urbanos.
La violencia, el narcotráfico y el crimen organizado socavan también el desarrollo, reconoció Casar, quien declaró que en el caso de México "sin la cooperación del país vecino es imposible resolver el problema", en alusión a Estados Unidos.
La política de "mano dura" no funciona en muchos países, señaló al considerar que ante esos problemas los gobiernos deben "reorientar las políticas públicas", como salud y educación.
Casar se encuentra en Madrid, con motivo de la puesta en marcha por España y el PNUD del primer Fondo para los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), con un presupuesto inicial de US$50 millones para los próximos tres años.
Al explicar las características de dicho Fondo Casar destacó que "todos" sus proyectos deberán incluir acciones para los objetivos de la igualdad de género y la sostenibilidad.
"España es el principal eje de este Fondo", dijo Casar al subrayar que "una vez más España demuestra su compromiso con el desarrollo".
Explicó que este martes el comité ejecutivo del Fondo elegirá los primeros proyectos del mismo, en el que se prevé que participen un total de 18 países, con una fuerte incidencia en América Latina.
El Fondo tiene entre sus objetivos contribuir a la seguridad alimentaria, el acceso al agua potable, el desarrollo económico inclusivo, según dijo Casar, quien explicó que los proyectos del mismo serán financiados conjuntamente con los gobiernos de los países receptores, un sistema este con el que "se multiplican los efectos".
Esta misma filosofía, ampliada al sector privado y otras fuentes, es la base de la llamada "Agenda Post2015", al concluir este año el programa inicial de los Objetivos del Milenio.