El diputado Bolsonaro fue acuchillado mientras era llevado en andas por seguidores en una manifestación. Un tuit por Bolsonaro dijo que estaba "bien y recuperándose" en un hospital de Sao Paulo.
Sao Paolo.- La campaña presidencial en Brasil estaba sumida en un caos este viernes, luego de que el día anterior apuñalaron al candidato de extrema derecha Jair Bolsonaro, quien está en cuidados intensivos aunque estable, cuando queda sólo un mes para los comicios.
El diputado Bolsonaro fue acuchillado en el estómago mientras era llevado en andas por seguidores en una manifestación callejera el jueves. Un tuit publicado en la cuenta verificada de Bolsonaro dijo que estaba "bien y recuperándose" en un hospital de Sao Paulo.
El ataque ensombrece aún más las elecciones más impredecibles de Brasil en tres décadas. Las investigaciones de corrupción han llevado a prisión a decenas de poderosos hombres de los negocios y la política en los últimos años y han indignado a los votantes.
Bolsonaro, que por años irritó a muchos con declaraciones incendiarias pero que cuenta con una base amplia de apoyo entre los conservadores, estará hospitalizado al menos una semana y podría demorar hasta tres en volver a hacer campaña, justo antes de la primera vuelta del 7 de octubre, dijeron médicos.
Sin embargo, su hijo Flavio dijo este viernes que debido a la gravedad de sus heridas probablemente no podrá hacer campaña antes de la segunda vuelta.
El candidato ha insistido varias veces en que la violenta policía del país debería matar a más narcotraficantes y delincuentes armados. El discurso funciona bien con los votantes más ricos, pero atemoriza al 50% de los brasileños, que dijeron en una encuesta Datafolha 2017 que temían ser víctimas de la violencia policial.
Las encuestas le dan a Bolsonaro alrededor de un 22% de los votos en simulaciones de la primera vuelta. Sin embargo, también muestran que perdería ante la mayoría de los rivales en el caso probable de un balotaje.
Algunos partidarios de Bolsonaro y analistas, especialmente en los mercados financieros, pronostican que el ataque podría darle un gran impulso. Argumentan que atraerá al 28% de los votantes que dicen estar indecisos o que no iban a apoyar a nadie.
Carlos Melo, un politólogo de Insper, una escuela de negocios de Sao Paulo, dijo que Bolsonaro podría obtener algunos votos, pero dudaba de un gran cambio, especialmente porque el 44% de los encuestados por Ibope dicen que nunca votarán por Bolsonaro, el candidato que concita más rechazo.
"No veo ninguna razón por la cual los votantes que previamente dijeron que lo rechazarán ahora lo apoyarían automáticamente", dijo Melo.
Poco Tiempo. El doctor Luiz Henrique Borsato, quien operó al candidato, declaró que "sus heridas internas eran graves y ponían en riesgo la vida del paciente", agregando que ahora había que impedir infecciones derivadas de la perforación en los intestinos".
"(El dolor) era insoportable y parecía como que quizás estaba pasando algo peor", relató Bolsonaro con voz rasposa este viernes, grabado en video desde su cama en el hospital. "Me estaba preparando para este tipo de cosas. Se corren riesgos".
La Policía Federal informó en un comunicado que sus agentes estaban escoltando a Bolsonaro al momento del ataque y que el "agresor" fue detenido en el acto. Las autoridades agregaron que las circunstancias se estaban investigando.
Policías locales en Juiz de Fora, donde ocurrió el incidente, dijeron a Reuters que el sospechoso, Adelio Bispo de Oliveira, de 40 años, estaba detenido y que parecía estar con sus facultades mentales perturbadas.
Bajo la legislación brasileña, la pequeña coalición de Bolsonaro casi no tiene tiempo de campaña en los bloques en televisión y radio regulados por el gobierno, por lo que depende de redes sociales y mítines en todo el país para captar apoyo. Si no puede salir a la calle su campaña podría peligrar.
Pero Flavio Bolsonaro, hijo del candidato, dijo que su padre estaba consciente y que el ataque era un impulso para su causa. "Solo quiero enviar un mensaje a los matones (...): simplemente lo eligieron presidente. Él ganará en la primera vuelta".
El exmilitar se postula como el candidato que defiende la ley y el orden y se posicionó como un opositor de la política tradicional aunque ha pasado casi tres décadas en el Congreso.