Según se concluye de los sondeos para las elecciones de este domingo, el Palacio Legislativo deberá ser escenario de intensas negociaciones para armar mayorías y coaliciones que den gobernabilidad al próximo gobierno.
La elección de este domingo está cargada de incertidumbres, sobre todo para responder la pregunta de quién será el próximo presidente. Los uruguayos no podrán saberlo en esta primera vuelta, según proyectan todas las encuestas. En cambio la cantidad de votos que reciban tanto el oficialismo como el bloque opositor responderá varias interrogantes. La primera y principal será la conformación del Parlamento, donde ya se asume no habrá una fuerza política con mayoría propia. En ese caso cada punto porcentual al Frente Amplio, Partido Nacional, Colorado, Independiente, e incluso a los partidos menores de izquierda radical, cambia el diseño del Parlamento y las bancas que le toca a cada uno.
La segunda respuesta, no menos importante, será las condiciones de la campaña rumbo al balotaje del domingo 30 de noviembre.
El Equipo de Datos de El Observador tomó la última medición de cuatro encuestadoras (Cifra, Equipos, Factum y Opción) y en base a sus proyecciones de indecisos de cara a la elección del domingo, calculó de la misma forma que lo hace la Corte Electoral para asignar bancas en el Parlamento.
Para el caso de Factum se tomó el dato de la última encuesta sin proyección, ya que esa empresa muestra rangos a la hora de trazar el comportamiento de los indecisos.
La conclusión principal es que el Palacio Legislativo deberá ser escenario de intensas negociaciones para armar mayorías y coaliciones que den gobernabilidad al próximo Poder Ejecutivo.
Las previsiones de las encuestadoras discrepan en varios puntos entre sí, y por ello se plantean cambios significativos en el diseño del Parlamento que asumirá el próximo 15 de febrero de acuerdo a quien se acerque más al resultado final. De todos modos se prevé una modificación más influyente en la Cámara de Representantes, donde se precisan 50 votos de los 99 totales para tener mayoría absoluta. El Senado, en cambio, puede cambiar su relación de fuerzas pero el bloque –FA por un lado y blancos y colorados por otro– que gane el balotaje obtendrá un voto extra con el vicepresidente de la República, y en ese caso se queda con la mayoría en esa cámara.
Según la encuesta que se mire, el Frente Amplio podrá obtener 45, 46 y hasta 48 diputados. Blancos y colorado sumados, por su parte, obtendrían entre 48 y 51 diputados.
El resultado del domingo, a la vez de dejar establecido cómo será el Parlamento, fijará las chances para ser presidente tanto de Tabaré Vázquez como de Luis Lacalle Pou, a esta altura los dos seguros rivales del balotaje.
Por un lado la coalición de izquierdas incrementa sus posibilidades de mantenerse en el poder si logra 45% o más, mientras que las hipoteca si cosecha menos de esa cifra. En tanto Lacalle Pou suma chances cuanto más votos obtengan blancos y colorados sumados. No será lo mismo un balotaje con mayoría de diputados de partidos fundacionales. La campaña de los blancos en alianza con colorados podría tener en ese caso una carta muy fuerte para captar votos, como la tuvo José Mujica en 2009 al tener, en primera vuelta, la mayoría propia.
Al mismo tiempo, la mayoría de los analistas ubican al Partido Independiente más cerca de lograr un acuerdo parlamentario con el Frente Amplio que con los partidos fundacionales. Las encuestas indican que el PI podría sumar un diputado y llegar a tres, los que pueden ser fundamentales para que la izquierda tenga, en total, los 50 votos en Diputados. Unidad Popular y el Partido Ecologista Radical Intransigente (PERI) ingresarían con un diputado al Parlamento en el escenario que plantea la encuesta de Cifra con proyección de indecisos. Las otras tres empresas que tomó El Observador para simular el diseño del Parlamento deja afuera por pocas décimas a los tres partidos menores.
El director de Equipos, Ignacio Zuasnábar, dijo a El Observador TV que la elección del domingo plantea un “cabeza a cabeza” para definir el Parlamento. Por ello, consideró que esos resultados finos podrían estar claros entre miércoles y jueves próximo. En 2009 el Frente Amplio se enteró que había alcanzado la mayoría parlamentaria el miércoles siguiente al domingo de la elección, y varias semanas después supo quién era su diputado 50.
En cuanto a los escenarios que arrojen los resultados del domingo, Zuasnábar entiende que tanto el Partido Nacional y Partido Colorado sumados podrían tener 50 votos en la Cámara de Representantes, como también que el Frente Amplio con el Partido Independiente, o con otros partidos menores, también llegue a esa mayoría tan deseada.