El ex presidente Tabaré Vázquez (2005-2010) se perfila como amplio vencedor en el oficialista Frente Amplio (FA), lo que le permitiría disputar el lugar que hoy ocupa su compañero, el presidente José Mujica.

Montevideo. Los uruguayos escogerán este domingo en elecciones primarias abiertas y simultáneas en todos los partidos políticos a los candidatos a presidente para los comicios nacionales de octubre.

El ex presidente Tabaré Vázquez (2005-2010) se perfila como amplio vencedor en el oficialista Frente Amplio (FA), lo que le permitiría pujar por suceder a su compañero, el presidente José Mujica.

La interna del principal sector opositor, el Partido Nacional (PN), es la más pareja, según las encuestas, con un virtual empate entre el senador Jorge Larrañaga y el desafiante diputado Luis Lacalle Pou.

El histórico Partido Colorado (PC) muestra un escenario de poca incertidumbre donde el senador Pedro Bordaberry se encamina a confirmar su liderazgo y candidatura.

En las elecciones presidenciales y legislativas de octubre los uruguayos definirán si el FA se mantiene en el poder o regresan los partidos tradicionales que lo detentaron alternadamente durante casi dos siglos.

A nivel nacional, el FA tiene una intención de voto que ronda el 44 por ciento, seguido por el PN con 30 por ciento y el PC con 18 por ciento.

Vázquez, de 74 años, dedicó su campaña a criticar a la oposición, defender los dos gobiernos del FA e ignorar a su competidora interna, la senadora Constanza Moreira.

El ex gobernante recoge una intención de voto entre los frenteamplistas de 81 por ciento, dejando a Moreira con apenas 15 por ciento.

"Teníamos un país sumido en la tristeza, era gris, había desocupación. ¿Cuántos niños y niñas nacían en la miseria?", se preguntó Vázquez en el cierre de su campaña.

"Hoy hay otras caras, con alegría, trabajo digno, esperanza", se respondió.

Moreira, una politóloga de 54 años cuya única experiencia en política ha sido el cargo de senadora que ocupa desde 2010, apunta a recrear principios históricos del FA y a sostener una nueva agenda de derechos.

En el PC también se observa una interna sin sorpresas en la que con un 80 por ciento de las preferencias se encamina a ratificar su liderazgo Pedro Bordaberry, hijo del ex gobernante Juan María Bordaberry.

Lejos está de saberse el ganador en el PN, donde el senador Jorge Larrañaga lleva una ventaja estrecha, 47 a 45, ante el desafiante diputado Luis Lacalle Pou, que a sus 40 años busca ser el candidato presidencial.

Larrañaga supo ser el candidato en 2004, cuando el FA accedió por primera vez al poder, y perdió la interna en 2009 ante el ex presidente Luis Lacalle (1990-1995), padre de su actual retador en la interna.

La Corte Electoral (CE) informó que están habilitadas para sufragar 2 milloones 657.594 personas, en un país de tres millones 400.000 habitantes.

Distintos encuestadores esperan que más del 40 por ciento de la población concurra a las urnas desafiando las bajas temperaturas del invierno austral.

En las primarias de 2009 votó el 48 por ciento de los habilitados, más que el 45 de 2004, pero lejos del 54 por ciento registrado en 1999, año en que se inauguró el nuevo sistema electoral.

"Los votantes van a andar en el torno del 40 por ciento", estimó el director de Opinión Pública de Equipos Mori, Ignacio Zuasnabar.

Mujica ha exhortado a los uruguayos a que "vayan a votar" más allá de sus opciones partidarias.

La veda electoral que busca la "reflexión" de los ciudadanos se inició la medianoche del viernes, prohibiendo actos proselitistas y la difusión de encuestas hasta el cierre de la votación, el domingo.

Desde la noche de este sábado también se impide la venta de bebidas alcohólicas y los espectáculos públicos.

Los poco más de 7.100 circuitos electorales abrirán sus puertas en todo el país desde la hora 08:00, hora local (1100 GMT), y hasta las 19:30 (2230 GMT).

Las encuestadoras recién podrán divulgar los sondeos a boca de urna a partir de las 20:30, hora local (2330 GMT).

Fuentes de la CE adelantaron que los datos oficiales comenzarán a surgir unas tres horas después del cierre de los circuitos.