En la ceremonia que marcó el “inicio del Pachakuti (nuevo tiempo)”, el presidente de Bolivia insistió en que este periodo marca el fin del capitalismo, para dar paso a la construcción de la cultura del “vivir bien”.

El presidente de Bolivia, Evo Morales, emitió un manifiesto “por la vida y contra el capitalismo salvaje” en la ceremonia del solsticio de verano; una agenda de diez mandatos para los pueblos: nueva democracia, descolonización, tratados por la vida, entre otros.

El acto en la Isla del Sol del lago Titicaca marcó el “inicio del Pachakuti (nuevo tiempo)” anunciado por el Gobierno y contó con más de 5.000 asistentes. Allí, el mandatario insistió en que este periodo marca el fin del capitalismo, para dar paso a la construcción de la cultura del “vivir bien” en todas las sociedades, en especial en las naciones del sur del planeta.

“El capitalismo creó una sociedad despilfarradora y consumista (…). Es por eso que el Estado Plurinacional (de Bolivia) propone que el ser humano recupere el sentido de la humanidad y la armonía con la Madre Tierra”, propuso.

Para el encargado de Negocios de la embajada de Estados Unidos en La Paz, Larry Memmott, tanto Bolivia como su país tienen la misma visión para solucionar problemas como la pobreza y el cuidado de la Madre Tierra; sin embargo, dijo que existen “diferencias de opinión sobre cuáles son las mejores maneras de hacer eso”.

Decálogo. Memmott rescató el mensaje del canciller David Choquehuanca, quien este viernes pidió comunicación para un mejor acercamiento entre los gobiernos. Estados Unidos y Bolivia retiraron a sus embajadores de sus legaciones diplomáticas; aquéllos serían repuestos el siguiente año sobre la base de la aceptación del acuerdo marco firmado en 2011.

Morales postuló “diez mandatos para enfrentar al capitalismo y construir la cultura de la vida”. El primero se refirió al ámbito político y sugirió refundar la democracia para empoderar a los pobres; una democracia comunal sin mayorías ni minorías, en la que las decisiones se tomen por consenso, y se imponga la razón y no el voto. “Que la política sea de servicio a la vida y no para servirse de la patria; y que el pueblo, por intermedio de los sectores sociales, alcance el poder”.

El segundo detalló las acciones que van contra la mercantilización, como declarar como derechos humanos a los servicios básicos y su nacionalización. El tercero involucró a lo cultural y planteó la descolonización del racismo y toda forma de discriminación y del mercantilismo, la recuperación de códigos de los pueblos del mundo y la creación de más Estados Plurinacionales.

El cuarto propuso acciones referidas al medio ambiente. En este punto, el presidente exigió a las naciones responsables de la actual crisis climática pagar la deuda por males ambientales y que reduzcan la emisión de gases de carbono que dañan la atmósfera.

En el quinto, referido a los recursos naturales, destacó el pedido a los países del mundo de nacionalizar sus materias primas y desarrollar políticas de industrialización. El sexto, sobre la soberanía alimentaria, demandó garantizar alimentos básicos para los mercados internos y drásticas sanciones a especuladores que buscan el aumento de los precios.

El séptimo involucró a las relaciones internacionales, en las que resaltó la diplomacia de los pueblos y la obligación de suscribir “tratados por la vida” y no acuerdos de libre comercio. En el octavo eje, destinado al conocimiento y tecnología, postuló erradicar el monopolio tecnológico con fines de dominación sobre los pueblos.

En el noveno, Morales lanzó duras críticas a la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Dijo que no aceptará injerencias del organismo multilateral y propuso la construcción de una institución paralela que apunte a velar por los derechos de los pueblos marginados y las sociedades pobres.

El último fue sobre temas económicos y financieros. El mandatario expuso cinco acciones: construir un nuevo orden financiero basado en principios de igualdad; librarse de ataduras del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional; crear un sistema de monitoreo del sector financiero; cancelar la deuda externa, calificada como un mecanismo de dominación colonial; y crear un banco mundial de los pueblos, que impulse políticas económicas para sectores marginados y pobres.

Textuales:

El Pachakuti

“Despertar del mundo a la cultura de la vida, fin del capitalismo salvaje”.

Consigna

“La acción política es un servicio a la vida, recuperando los códigos de los ancestros: no robar, no mentir, no ser flojo ni ser adulón”.

Tomar el poder

“El pueblo, por intermedio de sus organizaciones sociales, debe tomar el poder político, en el marco del mandar obedeciendo”.

Sistema mundial

“La institucionalidad mundial colonial está diseñada para someter y engañar a los pueblos a nombre de la libertad y la democracia”.

Diplomacia

“Ante la diplomacia de muerte y guerra, mercantilismo y privatización, debemos construir la diplomacia de los pueblos del sur”.

Finanzas

“Los países en desarrollo debemos crear nuestro propio instrumento financiero, el banco mundial de los pobres y de los pueblos”.

El canciller llama a acabar con el egoísmo. El canciller David Choquehuanca, denominado por el Gobierno como el “jilata pachakuti” que impulsó la celebración de la llegada del solsticio de verano, dijo este viernes que es tiempo de cerrar el egoísmo y el individualismo en esta “nueva era del vivir bien”, compartiendo los conocimientos de la tierra y de los pueblos indígenas para una nueva forma de vida en comunidad.

El jefe de la diplomacia boliviana empezó el acto de celebración ante miles de personas que se congregaron en la Isla del Sol, en Copacabana, en el lago Titicaca. Previamente hubo el ritual indígena denominado “permiso a la Pachamama”.

Bienvenida. “Quiero darles la bienvenida para cerrar el tiempo del egoísmo, del individualismo, de la envidia, de la división, de la maldad y del miedo; quiero darles la bienvenida hermanos para reencontrarnos con nuestra naturaleza, para reencontrarnos con nosotros mismos, con nuestros corazones; quiero darles la bienvenida para reconstruir sueños de manera comunitaria, para volver a nuestra gran familia; quiero darles la bienvenida para trabajar la unidad, la esperanza, la hermandad, la confianza para la armonía, para proyectar esa cultura de paz desde la Isla del Sol de este lugar sagrado”, manifestó Choquehuanca.

Meses atrás, el canciller había comentado que a partir de este 21 de diciembre, como parte de la muerte del capitalismo, también será el “fin de la Coca-Cola” y se daría inicio al “tiempo del mokochinchi”.