Juan Barros cuya renuncia fue aceptada por el Papa en junio junto con las de otros cuatro obispos, fue interrogado este jueves por más de tres horas por el fiscal capitalino Raúl Guzmán.
Santiago. El exobispo chileno de Osorno Juan Barros es investigado como sospechoso en dos casos de encubrimiento en medio del escándalo por abusos sexuales cometidos por miembros de la Iglesia Católica en el país, confirmó Reuters este viernes.
Barros, cuya renuncia fue aceptada por el Papa en junio junto con las de otros cuatro obispos, fue interrogado este jueves por más de tres horas por el fiscal capitalino Raúl Guzmán.
El religioso también es sospechoso de encubrimiento en varios casos investigados por el fiscal de la localidad de Rancagua, Emiliano Arias, dijo este viernes una fuente legal a Reuters, y será interrogado en breve sobre los casos aún no identificados.
Barros fue acusado de proteger a su antiguo mentor, el sacerdote Fernando Karadima, quien fue hallado culpable de abusar de menores por varios años en una investigación del Vaticano en 2011, pero el exobispo ha negado estar al tanto de los delitos.
En enero, el Papa se vio obligado a disculparse tras calificar como "calumnia" acusaciones contra Barros durante una visita a Chile.
Barros dijo a periodistas tras su interrogatorio en la Unidad de Delitos Sexuales de la policía en Santiago que era sospechoso de encubrimiento en el caso de Pedro Quiroz, un ex capellán militar que estuvo bajo su mando cuando era obispo militar entre 2004 y 2015.
"Contribuí con lo que pude aportar. Le conté al fiscal lo que sabía o no sabía", relató.
El fiscal Guzmán confirmó a los medios que Barros era sospechoso por ese caso.
Según una declaración publicada en el sitio de internet del obispado militar, en julio se presentó una denuncia por abuso en 1997 contra Quiroz. El sacerdote fue previamente investigado por el Vaticano por acusaciones de abuso en 2000, pero el caso fue archivado por falta de testimonios de las presuntas víctimas, según el comunicado.
El fiscal Arias confiscó en la oficina del actual obispo militar Santiago Silva, documentos relacionados con denuncias de abusos cometidos durante 20 años por clérigos que operaban dentro o fuera de las fuerzas armadas.