Pese al avance en los últimos años, la expectativa de vida de los brasileños sigue siendo menor que la de otros países en desarrollo, como Venezuela (73,8), Argentina (75,2), México (76,1), Uruguay (76,2) y Chile (78,5).
Río de Janeiro. La expectativa de vida en Brasil aumentó en poco más de tres meses entre el 2008 y el 2009, a 73,17 años desde 72,86 años entre el 2007 y el 2008, dijo el miércoles el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
Las mujeres siguen viviendo más que los hombres y tienen una esperanza de vida de 77 años al nacer, mientras que los hombres tienen una expectativa de vida de 69,4 años.
Pese al avance en los últimos años, la expectativa de vida de los brasileños sigue siendo menor que la de otros países en desarrollo, como Venezuela (73,8), Argentina (75,2), México (76,1), Uruguay (76,2) y Chile (78,5).
Según datos de la ONU, el país con mayor expectativa de vida es Japón, con 82,7 años, seguido por Islandia, Francia, Canadá y Noruega. En Estados Unidos, la esperanza promedio de vida es de 79,2 años.
De acuerdo al IBGE, entre el 2000 y el 2009 la expectativa de vida del brasileño creció 2 años, 8 meses y 15 días y, en relación a 1980, aumentó en 10 años, 7 meses y 6 días.
Mortalidad infantil. El sondeo también muestra una reducción de la mortalidad infantil en los últimos años. Desde el 2008 al 2009, la tasa de fallecimientos por cada 1.000 nacidos vivos retrocedió a 22,47, desde 23,30.
En el 2000, la mortalidad infantil en Brasil era de 30,7 niños por cada 1.000 nacidos vivos, mientras que en 1980 era de 69,12 decesos.
Pese al avance, la cifra es mayor a la de países latinoamericanos como El Salvador, Colombia, Venezuela, México, Argentina y Uruguay.
Según datos de la ONU, Islandia registra la menor tasa de mortalidad infantil, con 2,9 fallecimientos por cada 1.000 niños nacidos vivos, seguido de Singapur (3) y Japón (3,2). En Estados Unidos, la cifra es de 5,9 fallecimientos por cada 1.000 nacidos vivos.
"Si el declive de la tasa de mortalidad infantil no fuera interrumpida, se espera de aquí a cinco años una tasa de 15 decesos entre menores de 1 año por cada 1.000 nacidos vivos", agregó el IBGE en un comunicado.
De acuerdo a la entidad, los programas de vacunación masiva, el amamantamiento materno y el seguimiento de gestantes y recién nacidos son algunos de los factores que contribuyeron para una caída de la mortalidad infantil.
