Griselda Lobo, senadora del partido heredero de la guerrilla ya disuelta, en una rueda de prensa en la Eurocámara, solicitó a los países del bloque "que exijan al gobierno colombiano saber si los recursos realmente están llegando al proceso de paz en Colombia".
Bogotá. Representantes de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común(FARC), el partido político nacido del acuerdo de paz de 2016, pidieron en Bruselas que la Unión Europea (UE) vigile la aplicación de los compromisos firmados entre el gobierno colombiano y la antigua guerrilla.
“Pedimos a los países donantes que exijan al gobierno colombiano saber si los recursos realmente están llegando al proceso de paz en Colombia”, solicitó Griselda Lobo, senadora del partido heredero de la guerrilla ya disuelta, en una rueda de prensa en la Eurocámara.
“De las 123 mil familias que firmaron los compromisos de sustitución voluntaria de cultivos ilícitos, siete mil apenas fueron objeto del desembolso inicial”, agregó Jairo Cala, diputado y miembro de la dirección del partido.
Según los representantes de las FARC, el actual gobierno colombiano del conservador Iván Duque está incumpliendo “partes centrales del acuerdo” porque “los recursos no están llegando a los territorios”, lo que deja a excombatientes ante “un futuro incierto”.
Lobo cifra en un 5% los guerrilleros que han vuelto a tomar las armas desde finales de 2016 y advierte que “el incumplimiento del gobierno ha generado unas ofertas generosas por parte de grupos ilegales que persisten” en Colombia.
Las FARC suman el asesinato de “más de 180 compañeros” y “la estigmatización de la actividad de los ex combatientes, hoy en la legalidad”, como otros de los principales obstáculos para la superación del conflicto.
El partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) denunció con insistencia la falta de garantías de seguridad para sus integrantes tras la firma del pacto que condujo al desarme de unos siete mil combatientes bajo la supervisión de la ONU.
El enviado especial para la Paz de la Unión Europea, Eamon Gilmore, de visita en Colombia, llamó a detener los asesinatos de los que son víctimas defensores de derechos humanos y exguerrilleros de las FARC desde que se firmó la paz.
“Somos conscientes de los riesgos, pero creemos en el éxito del acuerdo y continuaremos apoyándolo política y financieramente”, indicó una vocera de la diplomacia europea, que destacó los 600 millones de euros (US$673 millones) destinados para la puesta en marcha del acuerdo.
Firmado hace casi tres años, el acuerdo de paz busca acabar con un conflicto armado que enfrentó a grupos rebeldes, paramilitares, agentes estatales y narcos y ha dejado ocho millones de víctimas entre muertos, desaparecidos y desplazados.