Enrique Peña Nieto, un abogado de 45 años del Partido Revolucionario Institucional (PRI), fue atacado sobre todo por casos de corrupción de miembros de su partido, que gobernó el país por 71 años hasta el 2000.
México DF. El candidato opositor Enrique Peña Nieto salió entero del primer debate televisado hacia las elecciones del 1 de julio en México, en el que sus rivales se dedicaron a atacarlo en un intento por acortar la amplia ventaja que lleva en las encuestas.
Peña, un abogado de 45 años del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que se ubica hasta 20 puntos arriba en algunas encuestas sobre la candidata oficialista Josefina Vázquez Mota, fue atacado sobre todo por casos de corrupción de miembros de su partido, que gobernó el país por 71 años hasta el 2000.
Pero las críticas también apuntaron a los altos niveles de pobreza e inseguridad en el Estado de México, donde fue gobernador entre el 2005 y el 2010, y hasta por un sonado caso policial en el que una niña reportada como desaparecida apareció muerta en su propio cuarto, que había sido revisado por la policía.
Vázquez Mota, del gobernante Partido Acción Nacional (PAN), acusó al PRI de frenar reformas que hubieran dado a México un mayor crecimiento económico, y al candidato priísta de no cumplir compromisos cuando fue gobernador.
"Me sorprende que hoy quiera tener un mejor deseo como cuando gobernador no lo logró", dijo la candidata, quien busca marcar diferencia del actual gobierno del presidente Felipe Calderón, que muchos critican por la violencia del narcotráfico y una economía débil.
Mientras tanto, el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, quien busca por segunda ocasión la presidencia, vinculó en varias ocasiones a Peña Nieto con el ex presidente priísta Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), visto por muchos mexicanos como un símbolo de corrupción.
Peña utilizó buena parte del tiempo para defenderse y salió bien parado, según observadores, pese a que previamente había dudas sobre su capacidad para debatir.
"Pareciera se hubiesen puesto de acuerdo (...) porque vienen el día de hoy con la navaja muy afilada", dijo el postulante priísta durante el debate, que duró dos horas.
Debate, sin peso en encuestas. Según los analistas, el debate no tendrá gran influencia en la evolución de las encuestas, debido a que los ataques sobre Peña eran previsibles.
"Peña Nieto salió bien librado, llevaba sus argumentos preparados para los ataques. De los tres, resultó el menos malo", dijo Javier Oliva, analista de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Los candidatos hablaron de sus propuestas para reducir la rampante violencia producto del combate a los cárteles del narcotráfico, que ha dejado más de 50.000 muertos desde que Calderón asumió en diciembre del 2006 y sacó al Ejército a las calles para enfrentarlos.
También se refirieron a cómo enfrentar los monopolios, sobre todo en telecomunicaciones, e impulsar el crecimiento económico en la segunda economía de Latinoamérica, aunque sin presentar nada novedoso respecto a lo que han expuesto durante la campaña.
López Obrador, quien se ubica en tercer lugar en los sondeos y en algunos en empate técnico con Vázquez, afirmó que en el gobierno de Salinas de Gortari se gestó una ola privatizadora y mostró una fotografía de Peña con el ex presidente, de quien el candidato priísta normalmente se mantiene distante.
"Salinas que tomó la decisión de formar un grupo compacto con sus allegados, entregó bienes de la nación con la gran mentira de que las privatizaciones nos iban a traer progreso y bienestar. A ellos les ha ido muy bien, aparecen en las listas de los más ricos del mundo (...) a costa de la pobreza de los mexicanos", dijo López Obrador.
La declaración hizo referencia a magnates como Carlos Slim, considerado el hombre más rico del mundo por la revista Forbes y quien obtuvo durante la gestión de Salinas la concesión de la telefónica Telmex.
En una encuesta del domingo de la consultora GEA-ISA, Peña siguió puntero con 35,8% de intención de voto, seguido de Vázquez con un 20,7% y de López Obrador con un 18,5%.