El ex presidente cubano Fidel Castro instó este lunes a los delegados del actual congreso comunista en La Habana a "rectificar y cambiar sin vacilación" el socialismo en la isla, para defenderlo de Estados Unidos y "superar" el capitalismo.
La Habana, Andina. El ex presidente cubano Fidel Castro instó este lunes a los delegados del actual congreso comunista en La Habana a "rectificar y cambiar sin vacilación" el socialismo en la isla para defenderlo de Estados Unidos y "superar" el capitalismo.
"La nueva generación está llamada a rectificar y cambiar sin vacilación todo lo que debe ser rectificado y cambiado, y seguir demostrando que el socialismo es también el arte de realizar lo imposible: construir y llevar a cabo la Revolución de los humildes, por los humildes y para los humildes, y defenderla durante medio siglo de la más poderosa potencia que jamás existió", escribió Castro en su columna de "Reflexiones".
El ex jefe de Estado, de 84 años, consideró que la tarea de los mil delegados participantes en el sexto congreso del gobernante Partido Comunista de Cuba (PCC), es "todavía más difícil" que la que asumió su generación "cuando se proclamó el socialismo en Cuba, a 90 millas de Estados Unidos".
"Por ello, persistir en los principios revolucionarios es, a mi juicio, el principal legado que podemos dejarle. No hay margen para el error en este instante de la historia humana", añadió Castro en su artículo publicado en medios cubanos.
El líder cubano estimó que la dirección del PCC, el único partido autorizado en la isla, debe ser "capaz de enfrentarse a la política del imperio (Estados Unidos) que pone en peligro a la especie humana y genera gansters como los de la OTAN, capaces de lanzar en solo 29 días, desde el inglorioso 'Amanecer de la Odisea', más de 4.000 misiones de bombardeo sobre una nación de África" (Libia).
"Es deber de la nueva generación de hombres y mujeres revolucionarios ser modelo de dirigentes modestos, estudiosos e incansables luchadores por el socialismo. Sin duda constituye un difícil desafío en la época bárbara de las sociedades de consumo, superar el sistema de producción capitalista, que fomenta y promueve los instintos egoístas del ser humano", afirmó.
El congreso del PCC, el primero en 14 años, comenzó el sábado 16 de abril con el objetivo de aprobar un plan de reformas económicas destinado a "actualizar" el modelo socialista vigente en Cuba. Dicho plan pasa por la reducción de "plantillas infladas" en empresas estatales, el fomento de la iniciativa privada, la eliminación de subsidios, incluida la libreta de abastecimiento de alimentos, y la unificación de las dos monedas de curso legal (peso nacional y convertible).
Los delegados del partido elegirán además un nuevo Comité Central, incluido el primer secretario, considerado el cargo político más importante en Cuba. Se prevé que el congreso oficialice la renuncia de Fidel Castro al frente del partido y elija como sustituto a su hermano Raúl, presidente de la isla desde 2006.
En otra "Reflexión" difundida el sábado, Fidel Castro se lamentó de no haber podido asistir al multitudinario desfile militar que precedió al congreso, y afirmó que su salud le permite pasar "tal vez una hora bajo el sol y el calor reinante, pero no tres horas".
Pese a que fue elegido delegado, el líder de la revolución cubana no asiste al congreso a puerta cerrada que concluirá mañana martes en el Palacio de Convenciones de La Habana. No obstante, en su artículo de hoy, aseguró que el domingo siguió los debates sobre asuntos económicos celebrados en cinco comisiones de trabajo.
El congreso del PCC coincide con el 50 aniversario de la proclamación del carácter socialista de la revolución y la victoria de las tropas de Fidel Castro contra la invasión de exiliados cubanos organizada por la CIA en Bahía de Cochinos.
En la inauguración del evento, Raúl Castro, hasta este lunes segundo secretario del PCC, reconoció que su gobierno carece de una "reserva de sustitutos debidamente preparados" e instó a iniciar de inmediato el "rejuvenecimiento sistemático" de los más altos cargos políticos, limitando además su mandato a un máximo de diez años.
Además, consideró que el aumento del "sector no estatal", a través de pequeños negocios particulares y cooperativas para los que ya se han condecido más de 171.000 licencias, no supondrá la "privatización de la propiedad social", sino que será "un factor facilitador para la construcción del socialismo". Por el contrario, anunció que no se permitirá la concentración de la propiedad.